El Ángel de los Ojos de Vidrio [PAUSADO]

Capítulo 3 : "¿Me enamorè?"

Mientras iba vagando por las calles el dolor se hacía más intenso, pase por un callejón y pude ver a alguien muy familiar para mí, y justo en ese sitio era donde el dolor había llegado a su punto máximo .Ya se había hecho de noche.

POV SEHUN

Luhan me había contado sobre Xiumin. Estaba enamorado de él, y lo peor de todo, era que lo conocía a la perfección. Ese tipo me había hecho la vida imposible cuando asistía a las clases de la primaria. Cuando éramos niños yo no podía defenderme, por eso "mi padre", entre comillas, me decía: “Eres un débil” - “Jamás saldrás adelante si sigues así” - “Marica” – “Nenita” y otras cosas parecidas. Yo no le prestaba atención, de por sí ya sabía que él me odiaba y a decir verdad, el sentimiento era mutuo. Mi madre siempre me ha inculcado la paciencia. Es un don que tenía cuando era pequeño, pero que a medida que crecía poco a poco se iba desvaneciendo.

Volviendo al tema de Xiumin, no sé por qué siempre me molestaba a mí, nunca le hice nada, es más ni siquiera le dije un ”hola” en toda su vida. Es por eso, que al saber todo lo que le hizo a Luhan, me enfureció. Pero lo que más me enfureció fue que Luhan aun lo siga queriendo. “¿Puede haber una persona tan ciega? “, ¡Sí! Y tiene por nombre “Luhan”.

Cuando él se fue de mi casa, comencé a tirar cosas por doquier, almohadas, papeles, etc. Volver a pensar en sus palabras, me hacían enojar aún más. Muy aparte de que estuviera molesto por lo que se había dejado hacer, la verdadera razón era una sola: “ESTABA CELOSO”, claro que en esos días, me negaba a aceptarlo.

Por suerte Kai apareció antes de que destrozara toda la casa.

- ¡Hyung!

- ¿QUE? –le grite-

- ¿Por qué estas actuando como un loco? –alzo un poco la voz-

- No es asunto tuyo –le respondí mirando al suelo-

- ¿Cómo que no? Mira… cálmate y cuéntame que te pasa.

- ¡Déjame solo!

- ¡NO!

-le mire muy enojado y fui a sacar una chaqueta del closet- Me voy –anuncie-

- ¿Eh? ¿A dónde iras?

- A cualquier lugar en donde pueda estar solo.

- No, tú no vas a ningún lado.

-se interpuso en la puerta- No quiero golpearte, salte de ahí.- Le respondí.

- Anda, golpéame, pero tú no saldrás de esta casa.

-suspire- Te lo dije –susurre. Y en cuestión de segundos estampe mi puño en el rostro de Kai-

Instantáneamente cayó al piso, e inconscientemente, se llevó una mano directo a su mejilla, al parecer le dolió. Me miro con los ojos muy abiertos, sin duda alguna, estaba sorprendido por lo que había hecho. Logre salir de la habitación, avance unos cuantos pasos, lo mire de reojo y aun estando de espaldas le dije: “Lo siento”, y sin más que decir, salí de la casa. Al principio no sabía a donde ir, luego se me vino a la mente algo.

No pensaba llegar a ese extremo, pero en esos momentos mi cabeza estaba explotando y no podía pensar claramente, todo estaba obscuro a mí alrededor. Fui a un bar.

Ahí estuve durante algunas horas, hasta que se hizo de noche. Como ya no tenía dinero que malgastar decidí regresar a casa. En el camino se me cruzaron un montón de ideas. La mayoría eran incoherentes. Pero supe que estaba mal, así que rápidamente me deshice de todos esos pensamientos.