Capítulo 1: La rutina

552 17 2
                                    

Parte de Yuya:
Siempre he creído que la vida está llena de sueños, qué debes desearles con desesperación y luchar por ellos para que un día puedan cumplirse, o al menos es lo que se me ha inculcado desde niña.
Mi sueño cumplido fue el mejor, nadie jamás lo habría imaginado nunca, lo peor fue cuando me di cuenta de que no quería permanecer con ese sueño toda la vida.

Mi nombre es Mariand Castrejón, pero mis amigos me llaman Yuya y tengo 23 años, soy mexicana, exactamente de Cuernavaca y este es mi último año en la carrera de leyes, estoy por graduarme.

Hoy era un bello día de otoño, caminaba de la mano con mi novio Sebastián, importante Youtuber mexicano, aunque parecía que caminaba con un Árabe por tantas cosas que cargaba en la cara para que no le descubrieran. Había pasado a recogerme a la Universidad y aunque hacía un poco de frío decidimos caminar por el centro de la ciudad.

Después de un rato de compartir besos, abrazos y sonrisas me llevó a mi apartamento, donde ahora estaba viviendo sola ya que había conseguido un trabajo de medio tiempo en un restaurant italiano como mesera y me daba buen abasto para vivir sola, además, Sebastián siempre me ayudaba con ciertos detalles, realmente él era mi todo en este momento, lo amaba, pero odiaba profundamente su trabajo, ya que lo veía muy poco gracias a sus juntas y viajes por el mundo. Lo peor era que sus mánagers le habían prohibido declarar su relación ante sus fans a pesar de tantos años juntos Sebastián y yo manteníamos un amor a escondidas, todo por sus tontas fans celosas que no dejaban tener pareja al guapísimo Villalobos, mi novio.

Parte Poché:

Después de una noche de amor con Calle desperté casi a la fuerza, mi chica se encontraba recargada en mi pecho profundamente dormida. Le di un pequeño empujoncito evitando que despertara y me levanté lentamente de la cama, me dirigí al baño y abrí la regadera esperando que el agua caliente cayera, me terminé de desnudar ya que una parte Calle la había hecho, me di un corto baño y salí envuelta en mi toalla.
Ella estaba ahí, aún sin despertar, a pesar de que eran casi las 2 de la tarde, hoy realmente era un día de flojera, el ambiente era frío y estaba nublado así que opte porque nos quedaramos en el departamento viendo series ya que esta misma tarde subiríamos el Kiss challenge 2 que habíamos prometido al llegar a los 6 millones de suscriptores y justo ayer llegamos a la meta, así que era cosa de solo ponerlo en la plataforma y despreocuparnos por el canal.

Así es, yo soy María José Garzón mejor conocida como Poché, la youtuber colombiana novia de la guapísima Daniela Calle.

Esperamos a que cayera la tarde para subir nuestro vídeo y después de hacerlo volvimos a la cama donde esperábamos la cena que habíamos encargado desde una pizzería.

Parte Yuya:

Sebastián se fue inmediatamente después de que llegamos a mi apartamento, realmente aborrecia su trabajo, me quitaba tanto tiempo a su lado, odiaba que las chicas se le declararan en sus presentaciones, que incluso amigas con las que colaboraba no supieran de nuestro noviazgo y fueran tan atrevidas con mi chico. Lo amaba, pero no soportaba esta situación o al menos no por mucho tiempo.

Me coloqué el uniforme del restaurant y me dirigí al trabajo, mientras viajaba en el transporte público recibí una notificación de Calle y Poché mis Youtubers favoritas, habían subido el tan esperado Kiss Challenge 2 EXTREMO, según lo que Sebas me había contado él sería partícipe de este vídeo así que mientras viajaba comencé a verlo.

En ocasiones me asustaba ver los vídeos de estas chicas, porque cada vez terminaba más enam... conmovida por Calle, me parecía tan linda, sí, me hacía dudar un poco, pero era imposible que pensara tantas tonterías ya que me veía junto a Sebas para siempre, cómo sería posible que me atrajeran las chicas?

-Desearía ser Poché, aunque sea para robarle un pequeño beso a Calle.  Dije susurrando para que los demás pasajeros no me escucharan.

Yo no soy Poché Donde viven las historias. Descúbrelo ahora