Capitulo 5

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Abrió la puerta de su casa y camino hasta la estancia en donde dejo su bolsa y se quitó las zapatillas. Suspiro con cansancio tratando de no pensar en lo que sucedió en el día y subió las escaleras con pesadez hasta llegar a su habitación.

Tomo el picaporte para abrir pero se quedó rígida en su lugar apretando el picaporte con todas sus fuerzas.

= Se lo tenemos que decir en algún momento = Exclamo una voz femenina conocida del otro lado de la puerta = es mi mejor amiga y no se merece esto.

= ¿Y ahora es que piensas en eso? = Pregunto Noah sorprendido pero con cierto tono de culpabilidad = ¿Por qué ahora Lana?

= Te amo Noah = Afirmo Lana con seguridad = y quiero estar contigo sin tener que escondernos de nadie.

Escuchar esas palabras hirieron en lo más profundo a la castaña que estaba al otro lado de la puerta sosteniéndose del picaporte de la puerta, como pudo llevo una mano al pecho exactamente donde se encontraba su corazón como si estuviera tratando de mantener su corazón unido a pesar de que ya estaba roto.

Lagrimas escurrieron por sus mejillas sin que ella fuera consciente de eso. Apretó los labios con fuerza, soltó el picaporte, se dio la vuelta y bajo las escaleras a prisa, tomo su bolsa, se puso las zapatillas de nuevo y salió de la casa azotando la puerta con la intensión de que Lana y Noah la escucharan.

Se subió a la camioneta en la parte del piloto lanzando su bolsa al asiento del copiloto y arranco.

A unos metros de llegar a la reja de la propiedad los guardias le abrieron y entonces la castaña acelero con más insistencia queriendo huir y alejarse de la causa de su sufrimiento.

Así fue como llego a la discoteca más popular de la ciudad dispuesta a olvidarse de todo por una noche.

Entro al lugar sin ningún problema y lo primero que hizo fue dirigirse a la barra a pedir un shot que se bebió de golpe arrugando un poco la nariz por lo fuerte del licor.

Una vez que el licor comenzó a hacer efecto en su cuerpo se colocó en medio de la pista de baile y movió sus caderas de un lado a otro de manera sensual y al mismo tiempo elegante.

Cerró los ojos dejándose llevar por la música hasta que se olvidó por completo de sus problemas.

Sintió como unas manos grandes la tomaban de la cintura con firmeza desde su espalda siguiendo cada uno de los movimientos de su cadera que bailaba al ritmo de la música.

En cualquier otro momento hubiera mandado a volar a quien sea que la estuviera tomando de la cintura de esa manera pero esa noche tenía el suficiente alcohol en su sistema como para mandar todo al demonio.

Se siguió moviendo de manera sensual. El hombre que la sostenía se pegó a su espalda moviéndose con ella en un vaivén de sensualidad. La firmeza del agarre sobre su cintura era tremendo y la obligaban a moverse más y más pegada a la entre pierna del hombre que sostenía y ya estaba bastante excitado por lo que podía sentir.

En el baile llego un momento en el que se comenzó a sentir un poco incomoda y no fue por la exagerada cercanía que compartían sino el hecho de que sus bragas estaban tan mojadas de lo excitante que se estaba volviendo bailar de esa manera tan carnal.

El hombre detrás de ella le corrió el cabello hacia un lado dejando cortos y lentos besos sobre la piel de su cuello, la castaña con la respiración acelerada se giró de golpe para encarar a su ahora pareja de baile.

Abrió los ojos con sorpresa al reconocer esos intensos ojos que parecían penetrar su alma. A pesar de la oscuridad podía ver con bastante detalle la claridad de sus hermosos y alucinantes ojos.

Besos que enamoran #2 [Sin Corregir]⭐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora