Capitulo 22

344 42 14
                                    

¡ATENCIÓN!

***Les había dicho que iban a ser capítulos algo fuertes y subidos de tono pero al final decidí hacerlo todo mucho mas suave de lo que quería pero aun así léanlo bajo su responsabilidad ya que puede perturbar a personas sensibles***

Maratón 3/3

Los ojos le pesaban como nunca antes pero aun así intento abrir los ojos. Tan solo logro entre abrir los ojos reconociendo que se encontraba en una especie de quirófano.

No tardo en reconocer al doctor y a la enfermera que la habían sedado. Sus alarmas se dispararon al mismo tiempo en que los recuerdos la invadieron.

Quiso levantarse y correr pero un horrible dolor en el vientre la obligo a detenerse y un grito desgarrador salió de su garganta.

El doctor miro a la castaña con la sorpresa pintada en su rostro al mismo tiempo que sostenía con fuerza un bisturí manchado de sangre en su mano.

Al parecer el efecto de la anestesia no había surtido efecto o no había durado lo suficiente.

La enfermera giro la cabeza hacia un reloj, le susurro algo al doctor y este a pesar de saber que su paciente estaba más que consiente siguió con la operación.

Los gritos desgarradores de Angel fueron pasados por alto por todos los que se encontraban presenciando la operación.

Maxwell permaneció cerca del doctor con los brazos cruzados sin perder de vista ni uno solo de los movimientos del doctor sobre el cuerpo consiente de Angel que con cada corte y movimiento gritaba con bastante fuerza.

Incluso un par de lágrimas habían escurrido por sus mejillas demostrando que el dolor que estaba sintiendo era horrible e inigualable.

El dolor que sintió la castaña fue tan intenso que en algún momento perdió el conocimiento.

Para cuando Angel abrió los ojos se encontraba tirada cerca de una carretera.

El sol estaba en su punto más alto. Parpadeo un par de veces hasta acostumbrarse a la luz, intento moverse pero sintió un dolor en el vientre que la estremeció.

Sus ojos se abrieron con miedo. Bajo la mirada a su vestimenta. Tan solo llevaba puesta una bata azul de hospital. Se a levanto encontrándose vendada del vientre.

Quiso llorar y gritar con todas sus fuerzas pero se detuvo a si misma cuando vio una caja de cartón tapada a su lado. Aun cuando todo su cuerpo estaba temblando, no dudo en tomar la caja entre sus manos y abrirla.

Lo que vio la horrorizo y le partió el corazón en mil pedazos.

Dentro de la caja se encontraba el cadáver azulado de un pequeño bebe que parecía estar dormido.

Era un varón.

Solo en ese instante sus ojos se cristalizaron.

= ¡Noo! = Grito con todas sus fuerzas presa del dolor = ¡Noo! ¡Nooo!

Grito y grito desgarradora mente pero no pudo llorar. Sus ojos permanecieron cristalizados durante lo que parecieron horas y tan solo dejo de gritar cuando al fin perdió la voz.

Él bebe permaneció entre sus brazos de manera protectora. Se puso de pie haciendo una mueca de dolor pero no se quejó.

Camino sin un rumbo fijo sosteniendo con fuerza a su bebe entre sus brazos hasta que un auto que iba pasando se detuvo a su lado.

Una pareja salió en su ayuda preguntando si se encontraba bien pero Angel estaba perdida en alguna parte de su mente. Solo escuchaba las voces de los desconocidos como un eco lejano y ajeno a ella.

En cuanto vieron al bebe sin vida en sus brazos, y todos los moretones y cortes, e incluso la bata la ayudaron a subir a su auto para llevarla al hospital mas cercano.

La pareja trato de sacarle algo de información pero Angel nunca contesto o les dirigió alguna mirada. Ellos se miraron entre ellos con cierta lastima.

Por cómo estaba el cuerpo de la castaña junto con la bata y el cuerpo de su hijo, se imaginaron lo peor, que había sido víctima de alguna clase de abuso que le costó la vida a su bebe o tal vez que ella misma había escapado del hospital al ver a su hijo sin vida.

Esas y otras teorías cruzaban por la mente de la pareja pero que se mantuvo en silencio para no alterar a la joven castaña que apretaba el cuerpo de su hijo contra su pecho de forma protectora pero con la mirada perdida.

En algún momento del trayecto Angel se quedó dormida y cuando abrió los ojos ya se encontraba en una habitación de hospital siendo revisada por una enfermera que parecía estar cambiando su bolsa de suero.

Se miró el vientre ahora casi plano y vendado por el corte de la cesaría que le habían practicado sin su consentimiento mucho antes de que su bebe llegara a término.

Soltó un largo suspiro mientras que los recuerdos llegaban a su mente tan solo para atormentarla y abrir un poco más herida que se había creado en su corazón.

La puerta de la habitación se abrió llamando la atención de la castaña por completo.

Su cabellera rubia fue lo primero que le llamo la atención. Sus miradas se encontraron diciendo una y mil cosas que no fueron dichas en voz alta. Los ojos de Angel se cristalizaron al igual que los de la rubia que no perdió el tiempo y corrió para envolverla entre sus brazos como muchas otras veces lo hizo.

= Lo siento tanto = Susurro Lana con la voz rota = te buscamos por todos lados durante un mes y simplemente no pudimos dar contigo. Esto es nuestra culpa por no haber estado allí para ti.

Una sonrisa se dibujó en el rostro de Angel. Sonrisa que estaba fuera de lugar pero al mismo tiempo demostraba tanto que hasta daba miedo.

= No fue su culpa = Susurro la castaña con la voz apagada = fue culpa mía. Solo mía.

= Por supuesto que no = Protesto Lana con seguridad = Se lo que estás haciendo. No tienes que culparte a ti misma por esto. Estaba fuera de tus manos lo que sucedería.

= ¡¿Es que no lo entiendes Lana?! = Grito Angel con ira saliéndose de sus casillas por primera vez desde que había visto a su bebe sin vida en aquella estúpida caja de cartón como si de basura se tratara = ¡Yo pude evitar esto! Si tan solo hubiera dejado mi estúpido orgullo a un lado y hubiera aceptado la ayuda de mi familia ¡Esto no hubiera sucedido! ¡Y mi hijo estaría a mi lado justo ahora y no muerto! = La castaña quiso llorar, gritar y romper todo en su camino, quiso ceder y perder el control pero la determinación y la fortaleza ya estaba presente en su mente que trabajaba al mil por hora en busca de una sola cosa "venganza" = Mi hijo está muerto por mi culpa = Lo último lo dijo en voz bajo solo para ella pero aun así Lana la escucho partiéndole el corazón.

En todo el tiempo que Lana llevaba de conocer a Angel, era la primera vez que la veía perder el control de esa manera e incluso estaba segura de que estaba reprimiendo sus emociones. El dolor físico y emocional era evidente en su mirada y aun así no había derramado ni una sola lagrima por nada.

Incluso cuando sucedió lo de Noah, ella lo había tomado con demasiada tranquilidad.

Esa era su personalidad.

Aparentar una enorme fortaleza y una voluntad de hierro.

Esa era Angel Moriarty.

Lana quiso contradecirla pero sabía que en ese instante la castaña estaba en su peor momento.

Siempre fue una bomba con temporizador.

Su reloj se había encendido y por la expresión de seriedad en su rostro estallaría en cualquier momento.

Besos que enamoran #2 [Sin Corregir]⭐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora