Besos que enamoran #2 [Sin Corregir]⭐

Capitulo 21

¡ATENCIÓN!

***Les había dicho que iban a ser capítulos algo fuertes y subidos de tono pero al final decidí hacerlo todo mucho mas suave de lo que quería pero aun así léanlo bajo su responsabilidad ya que puede perturbar a personas sensibles***

Maratón 2/3

La castaña se sentó sobre el colchón abrazando sus rodillas tratando de mantener unidas las piezas rotas de su ser que habían sido destrozadas.

La opresión en su pecho era dolorosa pero aun así sus ojos se mantuvieron intactos fijos solamente sobre la puerta por donde había salido Maxwell hace un par de horas luego de violarla más de una sola vez.

Soltó un suspiro ignorando olímpicamente la mancha de sangre seca entre sus piernas.

Todo su cuerpo le dolía.

Desvió la mirada de la puerta para ver la herida cubierta por una tela en su pierna. Al menos la había curado bien después de apuñalarla en la pierna. Su mirada subió desde su pierna hasta su hombro, donde la marca morada y abierta de la mordía de Maxwell permanecía.

Sus brazos y piernas tenían varios moretones. Su cabello estaba enmarañado y sucio. Su rostro...su rostro era un desastre, con un par de moretones y el labio partido e hinchado.

La puerta se abrió otra vez. De nuevo ese hombre rapado. Esta vez tenía una expresión divertida la cual logro irritar a Angel que no estaba de ánimos para soportar su burla por lo que le estaba sucediendo.

El hombre como era su costumbre lanzo la comida dentro de la celda directo al suelo, se inclinó asegurándose de que la cadena que la sostenía estuviera bien sujeta al suelo y luego se retiró.

La castaña a pesar de su dolor físico y emocional se puso de pie tomando en su mano el vaso de agua derramado y lo lanzo con todas sus fuerzas contra la puerta ya cerrada.

Grito con todas sus fuerzas sacando toda esa ira y ese dolor que estaba desbordándose en su interior

Se sentó de golpe en el colchón y respiro un par de veces hasta que logro serenarse.

Fue entonces que sintió las pataditas de su bebe recordando le que estaba allí. Una sonrisa se dibujó en sus labios sintiendo un enorme alivio de que su bebe a pesar de todo estuviera bien y sobre todo brindándole alegría.

Quiso llorar de alegría pero sobre todo de alivio pero tampoco pudo hacerlo. Simplemente las lágrimas no escurrían pero eso poco le importo.

Varios días pasaron y la puerta no había sido abierta ni siquiera para llevarle comida y algo de agua.

Poco a poco la desesperación estaba haciendo efecto en ella pues ahora no solo se preocupaba por ella misma sino por él bebe que llevaba en el vientre que al pasar los días se iba moviendo un poco más recordándole de nuevo que tenía que ser fuerte y resistir para poder idear una manera de salir a salvo de toda esa situación tan caótica.

Justo cuando Angel estaba a punto de sucumbir a las incontrolables ganas de romper en llanto, la puerta fue abierta de golpe, su expresión se endureció y las lágrimas se quedaron estancadas en sus ojos.

Se puso de pie con los latidos acelerados cuando un médico entro junto con una enfermera y varios hombres comenzaron a acomodar equipo médico fuera de la celda,

Sus oídos zumbaron y pudo sentir los latidos de su corazón en la boca de su estómago. De manera protectora abrazo su vientre y retrocedió un paso sin estar dispuesta a darles vía fácil para lo que sea que el lunático de Maxwell tenía planeado.