Sweet Ice | MinJoong [Ateez] ~ HIATUS

Capítulo 5 | Cita

— Entonces ¿a dónde lo vas a llevar? —le preguntó su amigo moviendo la pajilla en el vaso.

— No lo sé —contestó nervioso viendo a Hongjoong a lo lejos que estaba atendiendo a un cliente.

— No me digas que no planeaste nada Song Mingi —dijo en tono de regaño, Mingi negó—. No entiendo cómo aceptó salir contigo —susurró negando con la cabeza.

— Ayúdame —suplicó juntando sus manos—. Por favor Hyung.

— Solo te voy a ayudar porque me llamaste Hyung —rió, hacia mucho que Mingi no lo llamaba así—. ¿Qué te gustaría hacer?

— Algo sencillo que nos permita hablar bien, lo quiero conocer —dijo pensando.

— Bien... —el pelinegro se rascó la cabeza cuando una idea pasó por su mente—. Podrías llevarlo a la feria cerca de casa —mencionó.

— ¿La feria? No lo sé ¿crees que le guste? —preguntó.

— A todos les gustan las ferias y puedes aprovechar para ganar un peluche para él —dijo con una sonrisa segura—. Solamente no hagas el estúpido y listo.

— Eso... Eso va a ser muy difícil Yunho, mi cerebro no funciona bien con él cerca.

— Entonces estás jodido amigo.

Y tal como predijo Yunho, estaba jodido.
Desde el momento en el que Hongjoong salió de su turno todo había ido de mal en peor; empezando porque al querer ayudarlo con su mochila había tirado su botella de agua haciendo un desastre y salpicando al chico, Hongjoong le había dicho que estaba bien pero el sentimiento de culpa seguía ahí. Después cuando iban caminando hacia la feria, que gracias al cielo a su acompañante le había encantado la idea, al tratar de hacer un «movimiento» terminó tropezando con una piedra por estar distraído ganándose un moretón en la rodilla y un dolor en sus palmas, aunque siendo sinceros esto no había sido tan malo porque Hongjoong lo había ayudado enseguida y había tomado sus manos con delicadeza y un débil sonrojo en sus mejillas.

— ¿Seguro que estás bien? Si quieres podemos regresar y...

— Estoy bien —sonrió—. Vamos a conocernos Hongjoong.

— De acuerdo —dijo con una sonrisa y voz temblorosa—. Mi nombre es Kim Hongjoong, tengo 20 años...

— ¿¡Veinte años!? —medio gritó el alto, disculpándose al segundo—. Perdona es solo que aparentas ser más joven... Entonces eres mi hyung.

— ¿Soy tu hyung? —dijo sorprendido el bajito, Mingi asintió—. ¿Eres legal Mingi? —preguntó deteniéndose, el castaño soltó una carcajada.

— No hyung pero no irás a la cárcel, lo prometo —dijo riendo—. Yo tengo 19 pero dentro de unos meses ya seré legal —le guiñó el ojo y volvieron a caminar.

— ¿En qué me metí? —se burló el mayor—. Prométeme que no me vas a denunciar —rió y Mingi casi muere de un ataque al corazón, era demasiado hermoso.

— Lo prometo, hyung —dijo recalcando la última palabra con burla y siguieron hablando de sus vidas cuando el menor se percató de la feria delante—. Ya llegamos.

Ambos chicos sonrieron con emoción y sin pensarlo Hongjoong tomó la mano del más alto con cuidado corriendo a la entrada donde pidieron dos boletos, Mingi se negó a dejarlo pagar diciendo que él lo había invitado a salir.

— La próxima yo pagaré —dijo y después se sonrojó.

— ¿Habrá próxima vez? —preguntó el alto sonriendo felizmente y el otro carraspeó.