Capítulo 8: Los anillos de Akhaten

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Los tres salimos de la TARDIS. Veo que toda la gente se encuentra caminando de un lado a otro, tratando de abrirse espacio para poder pasar entre todos los turistas que se encuentran en los puestos de los mercados. Volteó para ver cómo Clara se encuentra sorprendida por el lugar.

– ¿En donde estamos?-  pregunta sorprendida.

– Estamos en Akhaten- responde el Doctor con una sonrisa, hacia mucho que no veníamos, cosa que le pone de buen humor.

Empezamos a pasear por los puestos hasta que nos detenemos en frente de un puesto. El Doctor se ve interesado en una moto. Esta muy dispuesto a comprarlo a cualquier precio. Yo solo ruedo los ojos al pensar que no estaba dispuesto a cambiar nada.

– ¿Donde estamos?- pregunta emocionada.

– Estamos en Akhaten. Es un planeta que nos gustaba venir al Doctor y a mi cuando éramos jóvenes. Después, veníamos con su nieta Susan.

– Espera, ¿cuantos años tienes?- pregunta sorprendida.

– Tengo 1400 años- le digo con una sonrisa.

– Pero... tú pareces de... 28 años- comenta sorprendida.

– Y tú pareces de 1500- le digo con una sonrisa-. No siempre tenemos que aparentar la edad que tenemos. Aunque eso sirve para como ventaja, algunas veces- Clara se ríe de mi comentario.

El Doctor se acerca molesto a nosotros. Parece que no logro convencer al vendedor que le diera la motocicleta haciendo que empezara a caminar malhumorado mientras decía cosas apenas audibles.

– ¿Qué pasa? ¿Acaso no trae dinero?- pregunta Clara sorprendida.

– No es exactamente eso- comentó pensativa-. Digamos que para poder pagar algo tiene algo con un valor sentimental. Mientras más apegado sea, más caro sea.

– ¿Que Es lo más preciado que tiene?- pregunta curiosa.

– Para el Doctor es su destornillador sonico- comentó pensativa.

– ¿Y para ti?

– Este collar- le enseño el que me dio el Doctor.

– ¿Quien es Elizabeth?- pregunta con curiosidad.

– Soy yo. Es mi segundo nombre, solo que casi no lo dice porque todos los de mi especie me decían así. Y sin contar que la Reina Elizabeth me odia por algo que hice.

– ¿Que hiciste?- pregunta divertida.

– Es una larga historia-digo recordando, lo que probablemente pasara muy pronto.

El Doctor llega con nosotras apurados. Nos pide algo de mucho valor sentimental haciendo que esté por entregarle el collar que me dio. El Doctor me detiene en el momento que me lo voy a sacar.

– No lo hagas. Sabes lo mucho que significa para los dos este collar- comentó triste.

– Pero tenemos que dar algo para rentar esa motocicleta.

– ¿Que tiene de diferencia con la motocicleta antigravedad?

– Mucho- respondimos los dos al mismo tiempo.

– ¿Les sirves esto?- Clara se quito un anillo de sus mano derecha-. Era de mi madre. No se si le pueda servir.

– No- comentó, pero antes de que dijera la primera letra el Doctor le quita el anillo para irse corriendo, pongo mi mano en la cabeza-. Siempre pasa lo mismo.

– ¿Que hacemos ahora?-pregunta.

– Vayamos a caminar. A lo mejor encontramos algo.

Clara y yo empezamos a recorrer los puestos del mercado. Escuchamos como unas pisadas pasaban cerca de nosotras. No es hasta que alguien choca contra nosotras. Una niña, no más de 10 años nos miraba asustadas. Pasa entre nosotras y se esconden atrás.

Doctor Who (VII): RememberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora