Capítulo 6
Yuri
―¡Hola, hermano mayor! ―contesté tan alegremente como pude mi teléfono mientras iba pasando mis emails del trabajo.
Solo quedaban un par de días hasta que Otabek se fuera a su nuevo despliegue, y yo estaba peleando por hacer el máximo posible mientras pudiera y él pasaba unos cuantos días en casa con los niños. Entre ocuparme de los pequeños monstruos y seguir enfermo como un maldito, estaba pasando un mal rato intentando mantenerme al tanto con los pocos clientes que me quedaban, y ellos se estaban poniendo inquietos. Estaba exhausto, y la mayoría de las noches cuando entraba en mi pequeño apartamento tan solo quería arrastrarme a la cama y dormir, pero no podía. El trabajo empezaba en el momento en que ponía los pies en el suelo al levantarme, y sin una dosis de cafeína, estaba pasando por un infierno para mantenerme despierta lo suficientemente tarde para terminarlo todo.
―¿Qué está mal Yuricat? ―preguntó Chris, con sospecha en su voz.
―Entonces imagino que ya habrás oído las noticias.
―¿Qué noticias?
―No me tomes el pelo.
―Bien, me lo dijo mamá.
―Dios, ¿no se lo podré decir a nadie yo mismo? ―bufé, haciéndolo reír.
―Nop, estoy seguro que mamá te dejará que se lo digas a Vitya, preferiblemente cuando Otabek esté ya a mitad camino hacia otro lado del mundo así no tendrá que volar a Taraz y matarlo.
―¿Pero a ti te lo dijo?
―Estoy atrapado en el jodido Berlín, que está en el culo del mundo. Posiblemente ella pensó que yo era la apuesta segura.
―¿Cómo te va por ahí? No he hablado contigo en una temporada ―dije, tratando de masajear la parte baja de mi dolorida espalda. La vida en la armada tenía a Chris moviéndose de un lado a otro. A veces me costaba unos minutos poder recordar dónde estaba viviendo.
―Todo bien. Aburrido, pero bien. ¿Y qué tal contigo? Pasando por un montón de mierda, ¿eh? ―dijo él comprensivamente.
―Dios, Chris. No tienes ni idea.
―¿Cómo acabaste durmiendo con Otabek entre todos? ―preguntó él.
Resoplé.
―Lo sé, ¿está bien? El tipo no me aguanta.
―Le gustas a todo el mundo, Yura. Algunos son solo imbéciles.―Oí algo crujir de fondo y luego el sonido de él comiendo algo crujiente. Con la boca abierta. Dios, juro que mis hermanos no tienen modales cuando no están cerca de nuestra madre.
―Él no es un imbécil ―discutí débilmente.
―Me encanta el tipo, pero siempre tuvo la cabeza tan metida en el culo de Mila que es como si nunca hubiera visto la luz del día.
―Esa es una bonita imagen.
―Ya sabes a qué me refiero. ¿Qué pasó?
―Ya sabes lo que pasa, chico se emborracha en el aniversario de su difunta esposa, su madre adoptiva le dice al chico que lo cuide. El omega toma el coraje de ir hacia él, luego procede a tomarse una jarra de café llena de Jack's con el chico, y una cosa lleva a la otra...
―Mierda, ¿él te dejo embarazada en el aniversario?
―Qué impecablemente oportuno, ¿no?
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"No Rompas Mi Corazón" †OtaYuri†
Random¿Qué haces cuando tu alma gemela se casa con tu mejor amiga? Si eres Yuri Plisetsky, conservas a tu amiga Mila, te vinculas con sus hijos, y entierras tus sentimientos por su esposo. El hecho de que Otabek está en el ejército y fuera por largas tem...