Juntos a nuestra manera.

Algo exclusivo

Por alguna razón les habían dado el viernes libre, y sin tareas ni deberes, todos decidieron salir y no quedarse ese día en los dormitorios.

Mina, quien aún tenía la idea de animar a su amiga, planeaba ir a una de las fiestas que había mencionado anteriormente, claro que conociendo a sus amigos era obvio que no irían ellas dos solas.

Dicho y hecho, no sería así, además de su amiga Asui, se habían incluido al plan el trío de idiotas de sus amigos —Kirishima, Kaminari y Sero— y aunque aún no lo terminaba de creer, Todoroki e Izuku también.

Katsuki, quien no tenía nada que hacer ni con quien platicar llamó a Uraraka a su cuarto, le había dicho que quería hablar con ella.

— A ver Bakugo-kun, ¿se puede saber de que querías hablar?

El rubio cenizo estaba sentado en su cama, apoyado en la pared y Ochako sentada en la orilla pidiendo una explicación del asunto que quería tratar Katsuki.

Desde que se levantó y salió de la cama de la castaña hasta ahora, se había preguntado porque tuvo ese ataque con ese tal Natsume. Sabía que no podía recriminarle nada a la chica, porque no tenían ningún compromiso, lo dejaron claro desde el primer día, lo suyo sólo era sexo. Y al igual que ella podía estar con quien quisiera, él podía hacer lo mismo.

— Sólo quería decirte que no me expliqué bien anoche.

— ¿Qué quieres decir? — preguntó ella confundida.

— Si quieres acostarte con Hatsume o como putas se llame, puedes hacerlo, no me importa.

— Natsume, se llama Natsume. Además, ya te he dicho que sólo tropezamos y nos presentamos.

— Al carajo, como sea me da igual, así sea ese o cualquier otro imbécil, quería aclarartelo por lo de anoche.

Es verdad, anoche el chico explosivo tuvo un ataque de celos que no era normal, y él mismo lo reconoce.

— Supongo que durante todo un mes, me había acostumbrado a que sólo estuviera conmigo, pero eso no quiere decir que no pueda estar con otros chicos y yo con otras chicas. — pensó Katsuki.

— ¿No te importa que esté con alguien más?

— Así es, ya sabes que lo nuestro no es exclusivo, podemos estar con quien queramos. De hecho hace unos días me encontré con una chica de Shiketsu, me dijo que pasará por ahí el fin de semana para verla y tener, ya sabes...

A Ochako le dolió oír eso, habían pasado un mes juntos y él no había cambiado de parecer. Pues muy bien, si lo que quería era una relación abierta, eso es lo que iba a tener.

— Me parece perfecto y la verdad me alegra oír eso, tenía pensado buscar a Natsume, me dijo que cuando me volviera a ver me iba invitar a cenar. Que caballeroso, ¿no? ¡Me hacía falta conocer a un chico así!

La chica gravitacional se levantó y se fue sin mirar al chico que había dejado atrás. Minutos después Bakugo sólo miró por la ventana como se alejaba para buscar a ese tipo. No se sentía como había pensado, se supone que eso era lo que habían acordado, entonces ¿por qué no quería que la cara redonda fuera a buscarlo?

Ninguno de los dos iba a reconocer lo que en verdad querían.

[...]

Estaba enfadada y aquel idiota explosivo era la razón, si él se iba a acostar con ese tipa, ella también lo haría con Natsume, pero había un problema con eso.

Uraraka miró a un lado y luego a otro, sólo veía gente ir y venir, ¿dónde se supone que iba a encontrar a ese chico tan guapo?

Empezó a mirar hacía todos lados mientras caminaba sin rumbo, de repente chocó contra algo que casi la tira al suelo de nuevo. Un brazo la tomó de su cintura y evitó que se cayera, otra vez.