La irresponsabilidad y el chantaje lo provocan todo.
2 gemelas intercambia su vida, una por placer y diversión y la otra por conservar su posición y que su más terrible secreto no sea revelado y destruya todo lo que ha conseguido.
Prohibida🚫 su c...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me había ido mal en el amor, si, es cierto pero ahora tenía a alguien especial en mi vida, las cosas iban mejorando poco a poco, después de alejarme de todo los que me perturban la existencia, mi vida fue cambiando y para bien.
Todos estos meses no deje de pensar en, Sasuke, he tratado de olvidarlo intente infinidad de cosas, refiriéndome a que salí con, Indra un par de veces, él espera una respuesta a una pregunta en específico, respuesta que no tengo y ahora menos, Sasuke apareció en mi vida, con una simple llamada logro acelerar mi corazón y hacer que este lo desee de nuevo.
Escucharlo gritar que yo era su mujer me hizo sonrojar al instante, su voz ronca y posesiva en cierto modo me gustaba una la vez me intimidada. Se que me buscara por todos los medios posibles, también se que me encontrará pero antes de que lo haga quisiera tener bien definidos mis se sentimientos, ya no quiero amarlo, ni extrañarlo, no niego que en ciertas ocasiones las noches fueron difíciles, pero fui fuerte y salí adelante, me he acostumbrado a no verlo.
El caminar por los pasillos del supermercado se ha convertido en algo común desde que fingi ser, Shion jamás en mi vida lo había hecho y todo empezó por el, es algo insignificante pero que marcó mi vida, veo parejas disfrutando y riendo y no puedo evitar recordar yo también. Deje de pensé cuando mi carrito chocó con la espalda de alguien, iba tan metida en mi sentir que no puse cuidado a mi camino.
—Disculpe—sonreí—ando un poco distraída.
Era un chico Rubio, alto de ojos azules, unos lindos ojos azules, que por extraño que parezca me veían sorprendidos.
Parpadeo queriendo entender que pasa, él solo mira.
—¿Pasa algo? ¿Lo lastime?
—No, —Rasco su cabeza y sonrió. —Estoy bien.
—Ok—sonreí también. —Con permiso.
Continúe mi camino, el hombre era muy guapo, alto y al parecer muy alegre, volteo para verlo una vez más y se encuentra hablando por teléfono, moviendo las manos con inquietud. Se veía gracioso, pero no podía observar y reír todo el tiempo.
Continue con mi camino cuando escuche su voz dirigirse hacia mi, detuve mi paso y volteo a verlo, caminaba en dirección a mi, sonriendo.
—Disculpa, puede ayudarme. Es que no se donde esta el pasillo de pan.
—¿De verdad? —asintió—es en el pasillo tres.
—¿Puedes guiarme?
Su actitud era extraña, algo en mi me decía que mentía, no me inspira desconfianza ni nada de eso, pero si me intriga que quiera mi ayuda. Al final no le dijo muchas vueltas, dudo mucho que se trate de un pretendiente, así que lo ayude.
—Sígueme —Dije sin más.
Camino a la par conmigo, todo el tiempo sonreía, y de vez en a cuando miraba hacia la salida y a su móvil, nunca había visto a alguien tan al pendiente de su teléfono, como este hombre.
