walker: Que El Infierno se Congelé [Borrador]

☠️SALOME

Se acerca lentamente, y toma asiento a mi lado

Alejandro, es guapo ojos azules y pelo castaño, de facciones misteriosas, con cuarenta y seis años no está mal, es alto y de hombros anchos, tiene un traje gris de tres piezas sin corbata y con los primeros botones desabrochados simplemente se veía arrollador

—porque tan sola señorita- pregunta mientras posa una de sus manos en mi pierna

Yo contempló la acción y me obligó a responder

—no estoy sola señor -respondo y antes de agregar algo más

—de saber que vendrías a esta fiesta te hubiera invitado yo mismo-dice el

—de que va está fiesta señor?- pregunto haciéndome la inocente

En Nuestro coqueteo, siempre mantuvimos lo de señor y señorita, el insistió en que lo llamara por su nombre pero siempre me pareció atractivo el señor, así que siempre que me lo encontraba le decía así

—señorita- sonríe- aparte de ser conmemorativa por los años de nuestra alma Mater, es nuestro momento para estar con los alumnos que nos gustan sin ningún tipo de restricción, la mayoría de los alumnos aquí están buscando pasar alguna nota o simplemente salvar la carrera, aunque hay uno que otro que viene a seducir al profesor que le gusta -me mira- aunque no me explico que haces aquí si yo te ofrecí eso y te negaste rotundamente

Después de una leve pausa

—no puedo creer que de verdad vinieras a "esta" fiesta sin saber lo que implicaba, aunque sé que a ti te mueve el amor al arte – dice con una sonrisa cargada de promesas

—porque yo realmente no lo necesito señor, vine aquí en compañía de un amigo el cual si necesita salvar una nota-respondo cruzando las piernas para tratar de quitar su mano de mi pierna pero no sirvió de nada, porque la volvió a posarla e incluso se acercó más- siempre me a movido el amor al arte como ya dijo, no me veo obligada a realizar algo que de verdad no quiera o sienta correcto para mí.

—me lo imaginé señorita, pero al parecer su amigo fue a cumplir su cometido y la dejo a Merced de lo desconocido - dice mientras acariciaba mi mejilla- si vas a seducir algún profesor yo estoy a tus órdenes, ya eso lo he dejado más que claro