walker: Que El Infierno se Congelé [Borrador]

walker

Cálidos ojos marrones me miran, una sonrisa seductora, manos calidad recorren mi pecho

-eligeme lucifer, eligeme para que conozcas la felicidad - suaves besos trazan un camino en mi torso - No debes porque estar solo en el infierno, no debes odiar a la humanidad, yo te puedo enseñar lo que es amar- nuestras miradas se encuentran- sólo debes elegirme para que tu corazón conozca algo mas que solo oscuridad

Une nuestros labios, siento la suavidad de su cuerpo contra el mío, la acerco más a mi apretándola con mis manos, sus curvas suaves y llenas se sienten bien contra mis manos, contra mi cuerpo, quiero mas, doy la vuelta para mantenerla debajo de mi sin separar nuestros labios, ella me rodea las caderas con sus piernas, separa nuestras bocas soltando una baja risa, en sus ojos se ve un hambre que no intenta disimular una lenta sonrisa aparece en sus labios, acaricia mi barba con la punta de sus dedos

- cuando me tomes seré tuya, nadie nos podrá separar ni si quiera la muerte- acaricia mi mejilla- te daré la paz que tantos buscas pero te niegas a aceptar- sigue el contorno de mi rostro con sus dedos

-Di que me quieres Walker, acéptame y cambiaré la forma en que vez el mundo, la forma en que sientes, seré tu fuerza en vez de tu debilidad, seré la fuente de tu poder - me besa, dando un casto beso antes de alejarse - seré tu ancla - sus palabras resuenan hasta el fondo de mi pútrida alma, mis demonios se estremecen de satisfacción y temor en partes iguales

-es muy complicado, el infierno no permite debilidad, los caídos te destrozaran, por mucho que quiera mantenerte con vida no podré hacerlo, el infierno te corromperá tu alma pura - pego mi frente a la de ella- yo te corromperé - cierro los ojos- solo puedo sentir atracción e interés por ti, pero no puedo amarte, los demonios no puede amar - abro los ojos y me alejo un poco para verla mejor, su cabello se extiende por la sábanas blancas, su cara libre de maquillaje mostrando lo bella que es al natural- soy el señor del infierno, no puedo permitir una reina que cualquiera puede matar, o que yo por accidente puedo romper - miro su belleza preguntándome cómo viví tantos siglos sin ver algo tan hermoso

pero no debo dejar que este sentimiento nefasto me domine, no puedo permitirme querer esto, no puedo ser débil, no puedo, no puedo, el pensamiento retumba en mi mente, aprieto los dientes y la contemplo un poco mas, empapándome de su belleza, de su pureza, de todo lo que ella puede representar para mi pero estoy dispuesto a dejar ir

-ya no soy un ángel - la miro con pesar - soy un rey que debe tomar decisiones para mantener el equilibrio de su mierda, no solo depende el equilibrio del infierno de mi decisión, también el cielo, aunque muchos no lo crean -sonrió con amargura, ella me consuela colocando una mano en el centro de mi pecho- soy el que se ha encargado del trabajo sucio por años y todos odian por eso, soy el chivo expiatorio que todos necesitan y aman sacrificar - le doy un casto beso antes de alejarme - no te puedo arrastrar a mi reino de dolor, sufrimiento y depravación, donde tu único error es haber sido mi debilidad