#2

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– Steve... Peter no quiere comer —Tony se dejó caer en la silla que estaba enfrente de la mesa— ¿Que hago?

– Tony, tienes que acercarle la comida a la boca a Peter, no dejarle el plato y esperar a que tome la cuchara —Steve se acercó y beso la mejilla de Tony— Vamos, inténtalo.

– ¿Porque solo yo debo de darle de comer? También es tu hijo, nos quieres abandonar ¿Cierto? Yo que te di mis mejores días, lo sabía, ahora que tenemos un hijo ya te quieres ir...

– Tony, cálmate.

– No, es que ya lo sabía, ¿Qué dirán de mi?, de Anthony Edward Stark cuando se enteren que su esposo abandonó a su familia... Pensé que estaríamos juntos siempre, eso me dijiste cuando nos casamos ¿A caso lo olvidaste, Steve?

– Tony... solo te estaba diciendo como darle de comer a Peter y que lo intentaras —Steve tomó las mejillas de Tony, besó cada una de ellas y después junto su frente con la de Tony— Además ya que tú no le cambiarás el pañal debes de darle de comer, inténtalo.

Tony hizo un puchero, separó —a duras penas— su frente con la de Steve y se acercó a Peter que lo miraba fijamente, sonrió acercándose con el plato al bebé que agitó las manos en señal de alegría.

– Vamos, Peter abre la boca —Tony tomó una cuchara del puré y se lo acercó a Peter que seguía agitando sus manos— Anda, abre tu boca y come... Peter...

– Tony, tú sabes que a un bebé se le dice una frase específica para que coma —Steve estaba exhalando un poco fuerte aguantándose la risa por la cara de Tony— Anda, Cariño.

– Peter... A-aquí vi...viene —Tony sentía sus mejillas un poco rojas y volteó al escuchar la risa de Steve detrás suyo— ¡Tú n-no ayudas!

– Es que no deberías sentirte nervioso, somos tu familia y no te dire nada, te aseguro que cuando Peter crezca tampoco te dirá nada.

– Está bien —Tony volvió a voltearse y miró a Peter que ahora lo miraba fijamente para después soltar una leve risa— Tú puedes... Aquí viene... el... ¡No puedo! ¡Es vergonzoso!

– Si puedes y no es vergonzoso, Tony.

– Pero tú te empiezas a reír y Peter también se estaba riendo —Tony hizo otro puchero y miró a Peter— Cuando crezcas te castigaré por eso.

Steve solo miró a Tony y suspiró, a veces veía cómo su esposo sufría por una tarea tan sencilla, en especial cuando se trataba de Peter o algo parecido, Tony le había comentado hace un tiempo que no se sentía capaz de ser un buen padre para el bebé, Steve trataba de animarlo dejándolo hacer algunas tareas pero no funcionaban, esta era una de ellas.

– Tony —Steve se levantó y abrazó a Tony tomándolo de la cintura y acercándolo a él— No debes de pensar que es vergonzoso decirle eso a un bebé, nadie te escuchará decirlo, solo Peter y yo te escucharemos, además es algo común y es un poco absurdo que te preocupes por eso.

– Créeme se que es un poco absurdo pero no es que sea vergonzoso, no tanto, solo que me da miedo hacerlo mal —Tony recargó su cabeza en el pecho de Steve y suspiró— Hay que hacerlo juntos, esto no será trabajo solo de uno, ambos somos los padres de Peter, ¿Qué dices?

– Me parece muy buena idea —Steve sonrió, besó la cabeza de Tony y lo soltó para que le dieran de comer a Peter— Pero tú le dirás la frase, como si no supiera que querías zafarte de eso.

– ¡Steve! Eres malo —Tony volvió a suspirar y le pidió a Steve que cargara a Peter para más comodidad— Peter, mi bebé, tendrás que cooperar o te volveré a castigar.

– Tony...

– Tranquilo —Se acercó y sacó la cuchara del plato haciendo movimientos en el aire cuidando que la comida no cayera— Aquí... ¡Aquí viene el avioncito! Abre la boca Peter... no te sigas riendo Stevie.

Peter sonrió y abrió su boca permitiendo a Tony darle de comer, Steve apretó un poco a Peter y le dio una vuelta recibiendo un regaño de Tony por interrumpirlo, lo curioso es que si Tony no decía la frase Peter no abría la boca, Steve reía ante eso y volvía a pedirle a Tony que lo repitiera creando un silencio para después los tres —si, los tres— rieran un rato y volvieran a darle de comer a Peter.

Podría ser difícil pero la comida se convertiría en una de las mejores actividades que la familia haría.

Storgé  (Cancelada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora