III

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Sentía la adrenalina de ir rápido en una moto a la una y media de la mañana cuando la calle es territorio de nadie. Reía y sentía miedo pero no me importaba mucho, sentía saltar en las lomas de burro y gritaba. Matías reía y me ocasionaba más risa a mi.

Freno en un bar y bajamos.

-¿Tomamos algo? -Pregunto Mati

-Si, dale -Respondo y lo sigo.

Entramos al lugar y era un bar normal, no era ni muy cheto ni tampoco muy arruinado. Había jóvenes bebiendo y grupos de amigas jugando a algún juego que requiera alcohol de por medio. Fuimos a la barra y pedimos.

-¿Cerveza? -Me preguntó Mati y asentí- Dos cervezas -Le dijo al mozo.

Había una piba que estaba medio en pedo y decía pelotudeces en la mesa de atrás. Me empecé a reír.

-¿O no? -Me dijo la chica.

-¿O no que? -Le pregunté riendo.

-Me dicen que no puedo estar con alguien mayor que yo, pero yo digo que cuanto más viejo el vino, mejor ¿O no? -Me repitió.

Tiene que ser una joda.

-Tenes razón -Le dije y Matías reía.

-Al menos va a saber dónde está el clítoris -Me dijo.

Me quería reír muy fuerte y abrazarla, la flaca está entendió todo.

Nos dejó a mí y a Mati hablar, ya que este estaba esperando el momento en cual largar palabra.

-¿Que te pasa? -Me preguntó.

-Nada, lo rutinario de siempre, ya sabes -Respondi y llegaron nuestras cervezas.

Agarre mi vaso y tomé.

-¿Te aburris? -Asenti dejando el vaso en la barra.

-Estoy harta de que todo siga igual y nada interesante pase, si no era porque me sacabas a pistear con la moto juro que me iba a morir del aburrimiento que cargo -Sonrio.

-Me alegra saber que yo no te aburro -Dijo y analicé.

-Aclaro que hablaba de tu moto, no de vos -Rei y el chistó.

-¡Martina! -Se quejó.

-Es joda -Tome otro sorbo de cerveza.

-¿Querés ir a ver a los chicos? Esta Luli y está Sofi

-Si, dale -La vista fue a la puerta del lugar.

Observe bien y tratando de no creer que la cerveza me estaba pegando tan rápido, o era muy quebrada o le habían puesto algo. Pero trato de hacer foco con mis ojos, aún así la poca luz me dificulte el enfocar pero lo logro.
Iván y dos pibes más entran al lugar.
Escanea el lugar y me encuentra con sus ojos.

-Mar ¿Pasa algo? -Mati me tocó la pierna.

-No, solo que tomemos otra birra más y vamos ¿Si?

El pidió otra ronda más y esperamos a que salga ya que el mozo estaba ocupado.
Veo hacia donde estaba Iván y ya eligieron mesa justo cerca del baño, el se levantó a la barra del lado de la otra punta para hacer el pedido y yo, aprovecho para decir:

-Voy al baño -Me baje del banquito y me dirigí.

Caminé mientras Iván miraba como me dirigía hacia el, reía.

-Pensé que te sentías mal -Dijo.

-Pensé que estabas cenando con mis papás

-Estaba, pasado -Respondio.

Efimero || Ivan Marcone Donde viven las historias. Descúbrelo ahora