XII

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Me desperté y no estaba al lado mío, me alarme pero después recordé que tenía que irse.
Fui a la cocina y miré el reloj.

-Las once de la mañana -Dije en voz alta.

Mi celular estaba tranquilo por suerte, no tenía mensajes de mamá ni de papá así que estaba todo bien.
En la mesada encontré:

"No te quería despertar porque hacía frío y estabas cansada, te dejé una copia para que puedas salir, si querés quedatela

Cuídate

Iván

PD: espero veas el partido por mí y no por mis compañeros"

Colgaba la llave de mis manos, una llave común y corriente, la deje en la mesada.
Fui a bañarme, y comí algo, me puse un jean y el buzo de Ivan, ya que nadie iba a darse cuenta que era el mismo, comí un sanguche de jamón y queso con pan de salvado porque el se cuida siempre y salí a la calle.

Tuve que caminar bastante para salir del barrio cheto y por fin encontrar una parada de bondi pero lo logré, al ser las tres de la tarde todo estaba desolado y aunque me daba miedo trataba de despejarlo.
Tomé un bondi que me dejó cerca de casa y llegue por fin.

-Bien vos eh -Dijo Fede- Llega cuando quieras

-¿Sos mi papá? -Pregunté y subí las escaleras.

-No, pero soy tu hermano... ¿Dónde estabas?

-En lo de Luli -Conteste y entre a mi habitación con del detrás.

-No me mientas, dos segundos me bastó de chamuyarme a Luli para que me diga que no estabas ahí ¿Donde estabas?

-Con Matías -Lo mire con cara de orto.

-No me mientas te dije

-No te miento, Federico ¿Que te pasa? ¿Sos control de tránsito ahora? Estaba con Matías

-Matias vino hace media hora a buscarte, decime la verdad

-Uh bueno, estaba con Ivan -Dije.

-Que fácil que sos de manipular -Dijo y lo miré

-¿Qué?

-Ni hablé con Luli, ni vino Matías -Rió- Cuida esa manera de mentir porque así no te va a creer nadie eh

-¡Sos un pelotudo! -Grite- Andate

Se fue riendo de mí habitación y yo me acosté. No me sentía mal pero extrañaba mi casa.
Tengo cuatro días en los cuales no se que hacer ya que mis amigas me dijeron para seguir saliendo pero yo no tengo ganas, quiero dormir o estar con alguien durmiendo.
Matías me llamo a eso de las siete de la tarde diciendo si quería salir pero no quería porque tenía mucho sueño, era miércoles santo y habíamos faltado al colegio todos por la bendita joda de ayer.

Iván hasta el sábado a la mañana no iba a volver y yo le dije a Matías que le avisaba. Por ahí cambiaba de opinión, vaya uno a saber.

Me quedé mirando el techo, mi mamá vino a hablarme y de acostó conmigo.

-¿Estas aburrida, no? -Dijo mirando al techo, acostada como yo.

-Si, sumado a que mi cabeza es un quilombo

-¿Me querés contar?

Lo medite un segundo.

-Si...

-Bueno, te escucho

-Tengo dos personas que están ahí... Y realmente no sé qué hacer, cuando estoy con una pienso que la otra persona no tiene cosas que está si, y viceversa... Y cuando estoy sola extraño cosas de ambos... Supongo que me estoy volviendo un poco loca, no sé -Suspire.

Efimero || Ivan Marcone Donde viven las historias. Descúbrelo ahora