04 ϟ Actividades sospechosas (1)

6.9K 605 188
                                    

McGonadall se detuvo con Snape y su capa ondeante negra para ver a Issa con la varita en mano teniendo una pose erguida y orgullosa, para luego desviar la atención al cuerpo inconsciente de Pansy descansando sobre las rocas del camino.

—¿¡Qué sucedió aquí!? —pregunto enfadada McGonadall, pero nadie dijo nada—. ¡Black! —ella la miró de una forma poco amigable por estar gritando—. ¿Qué le hizo a la seño...? —empezó a preguntar, pero Issa la corto.

—Un desmaius —respondió sin problemas.

Ambos profesores la miraron sorprendidos, no esperaban que una chica de once años que apenas unas horas había comenzado sus clases en Hogwarts supiera hacer un hechizo tan avanzado para su edad.

Snape se agacho junto a Pansy y la apunto con la varita.

Ennervate.

Lentamente ella comenzó a abrir los ojos y a parpadear algo desorientada, para ser sentada con la ayuda de Theodore Nott, poniendo una mano en su frente.

—Me duele la cabeza —fue lo primero que dijo, pero Snape la tomó del brazo y la ayudo a levantarse para llevarla a la enfermería, pero Pansy a ver a Issa se detuvo en seco y la señalo con el ceño profundamente fruncido.

—¡Ella!, ¡ella me atacó sin razón! —exclamo, a lo que Issa rodó los ojos con una risa sarcástica.

—¡Ja!, si, claro —dijo cruzándose de brazos, mirándola con una sonrisa y una ceja alzada.

—¡Encima se burla! —siguió vociferando Pansy volviéndola a señalar mirando a McGonadall.

—Black, deténgase, usted le lazó un desmaius y eso es algo grave—indico, a lo que Issa miró a su jefa de casa negando levemente con la cabeza, como si se hubiera equivocado.

—No estoy negando lo que hice, solo quiero puntualizar lo ocurrido para que eso sucediera, ya que de seguro comprenderá que yo no voy por la vida lanzando hechizos a cualquiera que se me cruce —empezó a hablar con voz persuasiva y educada, parecía un político hablando con poder y seguridad en su palabras sin la necesidad de levantar la voz.

—Es verdad —dijo Harry poniéndose junto a ella.

—Nosotros lo vimos —los gemelos se acercaron levantando una mano cada uno—. Issa quería detener una pelea y la cara de perro la golpeo.

—¿¡A quien le dices cara de perro!? —gruño Pansy yendo decidida hacia ellos, pero Snape la detuvo con un fuerte agarre en su brazo.

—¡Weasleys! —McGonadall los miró con reproche—. ¿Una pelea entre quienes?

—Mi primo y Harry —contesto Issa—. Debo admitir que no reaccione bien ante la acción de la que se hace la victima, pero ella no se abstuvo de provocarme con palabras hirientes y de burla.

—Dudo que alguien reaccione bien si alguien lo golpea —comento Ron desde atrás.

Snape miraba a Issa con un ojo calculador, no esperaba que la chica sonriente a la que le enseño a preparar una poción antes de su comienzo de clases tuviera ese lado tan Slytherin. De cierta forma se sentía orgulloso aunque no fuera nada de él, pero también ahora sabia que debía mantenerla en su lista de alumnos talentosos y, de cierta forma, peligrosos por sus conocimientos de la magia.

Mientras tanto, Antares y Draco se encontraban pensando prácticamente lo mismo que Snape, aunque más apartados de todo el asunto.

—Bien. Parkinson, iras a la enfermería para revisar que no tengas ningún daño y espero que reflexiones de tu comportamiento hacia las demás personas —dijo McGonadall viendo a la chica.

𝐋𝐎𝐒 𝐌𝐄𝐋𝐋𝐈𝐙𝐎𝐒 𝐁𝐋𝐀𝐂𝐊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora