Narra Arobynn
Auch... eso dolió...
Júpiter: Ya llevé a tus hijastros a casa de Hibis. Aquí tienes a Ares.
Júpiter salió del portal y me dió a Ares. El cual estaba totalmente dormido.
Júpiter: Y... te recomiendo que dejes a Océano en paz por unas horas. Luego le explicas el por qué de esto.
Arobynn: Cierra el portal y ven aquí.
Júpiter saltó y caminó conmigo por la casa.
Arobynn: Si ella se niega a dejar a sus hijos por un tiempo... Que voy a hacer?
Júpiter: Dile que entonces no pueden estar juntos.
Arobynn: Pero yo-
Júpiter: Se que la amas. Pero el puede ser quien nos libere de Kyro y es tu hijo, tu sangre.
Arobynn: No puedo dejar a-
Júpiter: Jamás, Agnus puede estar muerto pero te mira desde el paraíso de Jik. Que crees que dirá cuando abandones a su nieto?
Arobynn: ...
Júpiter: Me tengo que ir. Pero recuerda mis sabias palabras.
Júpiter abrió el portal y se fue, cuando estaba cerrando la puerta principal, Océano me toca la espalda para llamar mi atención.
Océano: No voy a dejar a mis niños. Así que... me voy.
Arobynn: Océano? Como que-
Océano: Te estás volviendo igual que Kyro. Por favor, déjame traerlos.
Tomé mucho aire y miré hacia el suelo para decir.
"No voy a permitir que esos niños entren. Y no importa que digas, eso no va a cambiar. Si deseas verlos... lárgate."
Aún no puedo creer que haiga dicho eso. Odiaría perder a Océano otra vez, pero es lo mejor que puedo hacer ahora.
Arobynn: Toma las llaves de la mansión en Espartia. Quédate allí, no vuelvas.
Océano: P-pero?
Arobynn: Lo lamento... Si quieres estar con ellos tienes que irte.
Océano: Entonces me llevo a Ares.
Arobynn: Ya te dí tus opciones. Decide.
Ella se enfureció de una manera horrible y caminó hacia la puerta. Yo dejé a Ares en el sofá y la acompañé a salir. Abrí la puerta y antes de que saliera le dí un abrazo.
Océano: No me toques!
Después le dí un beso en la frente y la dejé ir.
Arobynn: Perdóname... Y... Te amo.
Ella se dió la vuelta sin decir nada y se fué. Aquí comenzaría la peor parte de mi vida.
Fui a donde el pequeño Ares y lo vi sentado en el sofá mirandome entristecido.
Ares: Mamá se fue?
Arobynn: Si...
Ares: Volverá luego?
Arobynn: Me temo que no.
El comenzó a llorar y yo lo tomé en mis brazos y al no poder contenerme comenzé a llorar también. El ver mi cara reflejada en el me dolía aun más.
Los días pasaron y aún no me relajaba ni un poco. Júpiter envío una carta contándome sobre Océano y el cumpleaños de Ares. Decía que Océano había estado en su casa, me maldecía y hablaba mal de mi. Obviamente que todo estaba escrito de otra manera. Mientras la leía Ares me interrumpió saltandome encima con mucha energía.
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Dioses de Olympia
Romance*Version Español* *Mejorada* Un gran relámpago alertó a todas las deidades las cuales volvieron a Olympia de inmediato, nadie podía creer lo que había ante sus ojos. La sangre del rey se escurría de el trono. De pronto el día soleado se volvió oscur...