Capitulo 26

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Los días iban pasando, a pesar de que hicimos la pases no quise que me contara el sueño, por una vez respetare su privacidad, ella también puede tener secretos, pero hay un problema... La veo más hermosa con el pasar de los días

Hace poco me entere la fecha de su cumpleaños, es dentro de un par de días, por fin cumplirá la mayoría de edad, eso me alegra

El extranjero se ha vuelto más cercano a ella, se la pasan hablando, cada vez que llego a una habitación ellos estan hablando, un sentimiento extraño aparece en mí, como si estuviera enojado sin razón

Me encuentro sentado en el jardín trasero, miro acostado el cielo nocturno, quiero tranquilidad, hemos tenido que regular los entrenamientos por la presencia de nuestro invitado, lo que en realidad no me molesta, no está mal descasar un poco

Siento que alguien se sienta a mi lado, miro de reojo encontrándome con Estefanía, ella mira el cielo con una sonrisa cálida,

-Acuéstate – le digo con una sonrisa

Ella me obedece, e acurruca en mi pecho, por alguna razón su tacto me está haciendo sentir extraño, me gusta esto, acaricio su espalda, llevábamos tiempo sin estar así, los dos tranquilos, sin importa mucho lo demás

-Que linda noche, ¿verdad? – le digo con total tranquilidad

-Demasiado linda – dice dulcemente – ¿Has hablando con John?

-No – le respondo con simpleza

-Deberías, es una persona agradable – me mira – Piensa diferente a lo hombres de este lugar

-Hablare con él después – frunce el ceño – ¿Qué?

-Nada – dice levantándose – Voy a la habitación especial un rato

Tan solo la veo entrar, tuvimos que cambiar nuestra forma de decirle a la habitación de entrenamiento ya que el extranjero sospecharía y nos traería muchos problemas, respiro hondo, no quiero mant6ener una conversación con ese hombre, me cuesta confiar en los demás, ella más que nadie lo sabe

Coloco mis manos detrás de mi cabeza, quiero estar tranquilo, sé que mi padre cuando se entere que no he entrenado casi se va a molestar y me va a dar un sermón, el cual fingiré escuchar, que molestia

Cierro los ojos para sentir la brisa helada de la noche, mi cabello se mueve un poco, se siente bien

Hago una mueca al escuchar unos pasos en la madera del suelo de la casa, luego pasan al césped, abro un ojo encontrándome con ese hombre, ¿cuál era su nombre?, lo habré olvidado

-Buenas noches general – dice con una sonrisa

-Buenas noches – digo con simpleza

Se sienta a mi lado, me hace sentir incomodo, me siento con brusquedad, escucho como suelta un suspiro pesado, luego me mira, como si quisiera algo

Me alejo un poco con incomodidad, ríe ant6e mi acción, no quiero problemas con alguien del exterior, causo problemas y la muerte será mi castigo dejando a Estefanía solo para que la casen con otro general o cabo; una mujer joven y bella, no duraría mucho sola, no sé en qué manos podría caer

-¿Por qué te alejas? – dice riendo, no respondo – No tengo intenciones de causar problemas si es lo que piensas

-¿Qué desea? – le digo con frialdad

-No entiendo, deja las formalidades – dice con el ceño levemente fruncido – No estamos en servicio... No somos del mismo país – sonríe – Háblame como un amigo

La mujerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora