¿Desconocidos?
Persona extraña cuyo origen e identidad no se conoce.
Pero en esta historia dos personas desconocidas están apunto de conocerse, ambos con pasados oscuros que atormentan el presente, su dolor es el que alimenta sus vidas, recuerdos y...
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¿CONFIANZA?
ADARA:
Estábamos parados fuera de la casa Miller, posiblemente eran las cuatro de la tarde, una de las chicas de servicio nos había abierto la puerta, para poder pasar.
La verdad es que conocía esta casa a la perfección ya que se habían hecho algunas fiestas y reuniones aquí. El ama de llaves nos llevó a la sala para esperar a que Saige bajara, tenía que hablar con ella y posiblemente pedirle ADN ya que quisiera confirmar si el pequeño niño era o no el hijo de Ryan.
Además quería preguntarle si había visto a su hermano o tenía algún contacto con él. Aunque había una probabilidad de que ella puede negarse a lo que yo le estoy pidiendo y que quiera proteger a su hermano.
Escuchamos risas y pasos acercándose, al ver dos figuras sabía que no estaba sola; ella estaba acompañada por Dylan Young el hermano de Christopher, aquel chico era la misma imagen de Christopher salvo por sus rasgos más jóvenes tenían los ojos grises y cabello negro.
Saige tenía su cabello negro en una coleta alta dejando a la vista algunas marcas de chupetones ambos tenían cara de "acabamos de tener sexo" lo que a mí no me interesa.
– Hola chicos – se acercó Saige con una gran sonrisa y soltando su cabello para no notar los chupetones que obviamente ya nos habíamos dado cuenta
– Hola – respondí afablemente pero era lo que menos sentía en ese momento
Me levante y le di un beso a Saige y Dylan.
– Hola – hablo Orión levantándose y dándole un beso en la mejilla y tomando la mano de Dylan
Saige se separó y se colgó del brazo de Dylan.
– A qué se debe su grata visita – habló Saige abrazando a su novio
– Quería hablar contigo – le dije – pero en privado
No era que lo estaba botando pero técnicamente no quería que Dylan escuchara la conversación y menos el personal de servicio.
– De igual manera yo ya me iba – respondió Dylan sin ninguna objeción – adiós bebe, adiós chicos
Salimos al gran patio que estaba lleno de flores, había una mesa con sillas a un lado del jardín para sentarnos cómodamente, los tres estamos juntos en una mesa sin interrupciones del personal de servicio ni nada. Saige estaba relajada, mirando su hermoso jardín, Orión se encontraba recostado en la silla pensando o esperando a que yo comience.
Me aclare la garganta para empezar con el interrogatorio; era muy gracioso tildarlo así pero es lo que es.
– Saige ¿sabes dónde está tu hermano? – pregunte mirándola, ella solo me miro sorprendida por lo que le había dicho
