4. No es tan fácil

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Shawn:

No pude dejar de pensar en lo que pudo pasar con Roxana y Justin pero cuando ella me llamó llorando supe que nada salió bien, ahora lo único que deseo es estar con Roxana, pero este GPS no ayuda en nada, llevo como 15 minutos intentando llegar a su casa pero por más que lo intento no lo logro.

Cuando estoy dándome por vencido encuentro mi destino, la casa de Roxana.
Estacioné el auto en la vereda de la casa de Roxana y entré sin tocar la puerta.
Caminé por la casa hasta encontrar la habitación donde estuviera ella.
Ninguna de las habitaciones a las que entré, en ninguna de ellas estaba Roxana así que pensé "si tú estuvieras en esta casa ¿en qué habitación dormirías?" Y fue ahí donde me dije a mi mismo "Pendejo" ¿por qué no busqué en la habitación principal? O ¿por qué no simplemente le pregunté al personal de la casa? Tan mal que me vieron y no dijeron nada.

Entré a la habitación y la vi ahí, acostada en la cama, ella parecía estar dormida así que me apresuré a recostarme al lado de ella y abrazarla.
Ella no se despertó solo se dio vuelta y me abrazó, ambos nos quedamos dormidos abrazado del otro.

Cuando volví a despertarme ella ya estaba sentada en la cama, tenía una foto en sus manos y sollozando la lanzó al piso.

-Hey, tranquila.- Ella comenzó a llorar más pero no sabía la razón, creí que ella quería eso, creí que ella quería terminar con esa relación.- ¿qué pasó? Cuéntame.

-Promete que no te vas a enojar.- Asentí preocupado.- Justin intentó golpearme.

-¡¿DONDE ESTÁ EL IMBECIL?!

-Shawn por favor, lo prometiste, intentó hacerlo pero obviamente no se lo permití, Shawn créeme que si él me hubiera puesto una sola mano él ya no estaría libre.

-Jamás permitiré que algo malo te pase, voy a protegerte de todo mal para que seas feliz.

-Te amo Shawn.- La miré y me di una cálida sonrisa.

-Y yo te amo a ti amor.- Me acerqué a besarla y cuando estuve a punto de tocar sus labios, el celular comenzó a sonar.

-Hailey ¿qué pasó?.- Roxana se levantó y caminó al otro lado de la habitación.

-Shawn, Justin estuvo aquí en el departamento, dime por favor que es un error y por favor dime que tú no estuviste con Roxana, por favor dime que no.

-Lo siento Hailey pero lo que te dijo Justin es cierto.- Roxana volteó a verme preocupada, le extendí la mano para que viniera conmigo e hice que se sentará en mis piernas, puse a Hailey en alta voz y ella llorando me dijo:

-¿Podemos hablar? Esto no se puede arreglar por llamada.- Miré a Roxana y ella asintió y acarició mi mejilla.

-Esta bien, veámonos en la cafetería de siempre en 20 minutos.- Miré a Roxana una última vez antes de colgar y me levanté.

-Terminaré esa relación, es por el bien de todos.- Me agaché a besarla y decirle adiós.- Volveré más tarde para ver cómo estás ¿si?

-Si, te espero.- Salí de la habitación para después subir a mi auto.

Roxana:

Cuando Shawn se fue me quedé sola en la casa, sin nadie más que el personal de esta misma.
Me fui a la pequeña oficina que tenía en la casa y me puse a idear más cosas para los cosméticos.
Cuando estaba más concentrada para hacer las cosas, entra María avisándome qué hay alguien esperándome afuera en la sala.
Agradecí a María y fui a donde estaba la persona.

-Sasha, que sorpresa ¿qué haces aquí?

-Quería hablar contigo claro, si puedo hacerlo.

-Por supuesto, toma asiento.- Le indiqué con la mano que dijera lo que tenía que decir.

Aprendiendo a amarnosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora