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Hoy a diferencia de otros días el cielo estaba despejado. Al ver el sol a través de la palma de mi mano, era tan brillante que tuve que cerrar los ojos para no lastimarme.

-¡Hey Yuzu!

Bueno, no es como si saludarlo fuera algo malo. Me gusta caminar por la calle y escuchar su voz llamándome. Es como mi pequeño escape de algunas cosas. Si no me hiciera sentir tan malditamente cómoda posiblemente ya me habría alejado de el hace mucho. aunque ahora me causa una mala sensación desde aquello.

-¡Hola!

Dije intentando fingir estar emocionada.

-Vamos, ¿Te dejaron tarea en la escuela o porque tan seria?

-huh... solo fue un día complicado.

Fue una noche complicada mas bien. Las ventajas del maquillaje es que hacen menos notoria mi falta de sueño. Durante todas mis clases puse atención al cien por ciento en el pizarrón solo para evitar pensar en todo lo que paso. "Yo no te amo" a veces pensaba que ella simplemente no me quería "Pero tampoco quiero verte besando a alguien mas" ahora no se ni siquiera que es lo que yo debería sentir respecto a eso. Lo mas difícil de todo fue la mañana. Despertar al lado de la nada fue mi primer indicio para descubrir que ella podía ser demasiado indiferente a las consecuencias de sus actos.

Si me concentro un poco aun puedo sentir su sabor en mi boca y la sensación cálida dentro de mi que quiere desbordarse. Ahora... Shiro evoca ese sentimiento de tranquilidad como el primer día que nos vimos. El me mira con esos ojos brillantes y esa sonrisa de siempre y lo sabe. No me lo dice, pero algo en su forma de verme me vuelve paranoica. El sabe que sus manos me aprisionaron contra la cama y me volvieron a robar. El lo sabe y no porque lo haya visto o escuchado de alguien. El sabe que en estos días no ha podido cambiar nada de lo que siento. Y creo que le dolería si le dijera que no mueve nada dentro de mi cuando me besa. Admito que el es agradable, es alguien de buen aspecto y con una gran sintonía conmigo. Pero no es ella.

Justo cuando mas metida en lo mio estaba, sentí su mano sobre mi cabeza. Lo mire esperando por primera vez ser yo quien adivine lo que estaba pasando en su mente. Pero como siempre, solo me quede ahí esperando que algo que no ocurriría pasara. El rio al ver mi cara perdida y revolvió mi cabello.

-Boba

Estas cosas de él me agradaban. Es agradable y hasta un poco tierno de su parte.

-¿Quieres que te acompañe a casa hoy?

-... Creo que no, ya he abusado bastante de ti estos días. ¿Te veo mañana?

-¿Solo una visita rápida? Me sentiré solo.

-Si, bueno... tengo que preparar la cena y estudiar un poco para los exámenes y esas cosas...

-Vale, entiendo. La vida del estudiante. Al menos déjame acompañarte a casa hoy.

Huh... el me mira e intenta suplicar con eso.

-De acuerdo.

De pequeña mama solía decir que debía dejar de ser tan amable e intento explicarme que una actitud como la mía podía lastimar a alguien aunque no fuera mi intención, lamentablemente mi cabeza aun en ese entonces estaba hueca y termine olvidándolo. En el momento en que intento alcanzar mi mano la aparte y me miro raro.

-Perdón, mis manos están frías.

-No importa.

Dijo mientras la tomaba de todas formas. Tal vez ahí descubrió mi mentira, porque mi temperatura corporal es alta. Las personas mienten por muchos motivos. A esta altura soy consciente de que no podemos seguir así. El es tan amable y comprensivo. El puede que sea alguien complicado de entender, pero es agradable. Y me gusta. No de la manera que el quiere, pero lo hace.

Lo suficiente.Where stories live. Discover now