Familia

1K 115 58
                                    


Our Child

Capítulo Ocho: Familia

Esa noche, Logan entró en el dormitorio de Peter con una sonrisa de oreja a oreja. Peter estaba sentado en la cama, esperándolo. Logan se acostó a su lado y se dieron un beso como cada noche que pasaba en Westchester.

-Sabes, mocoso, hoy me porté bien – anunció Wolverine -. Creo que me redimí.

Peter entendió qué le decía y sonrió.

-Me alegra que hayas arreglado el malentendido entre Erik y su hijo. Me dio mucha pena por los dos.

Logan quedó pensativo.

-Pocas veces sentí tanto remordimiento y mira que he hecho cosas – admitió -. Pero era hacia personas que de alguna manera se lo merecían. Esto fue diferente, David no se merecía escuchar eso y Erik no se merecía que arruinara el vínculo que estaba construyendo con él.

Peter lo abrazó y le dio un beso ruidoso en los labios. Estaba feliz de que se hubiera solucionado el conflicto y ver a su amante reflexivo y admitiendo culpas lo excitó. Riendo lo empujó para que Logan posara la cabeza sobre la almohada y se le ubicó encima.

Wolverine entendió el mensaje y la tensión hizo que las garras se le salieran apenas. Peter sintió el leve cosquilleo de sus puntas que permanecían encarnadas cuando le masajeó las manos, y sonrió con sus hoyuelos.

-Tu buena acción de hoy merece una recompensa, lobo – sonrió sugerente y lo besó.

Entre los chasquidos, se desprendieron las camisas y se bajaron los pantalones. Arrojaron las prendas al suelo y, desnudos, se revolcaron en la cama para llenarse de caricias, mordiscos y más besos. Apretando a Peter contra su pecho, Logan se incorporó para abrir el cajón de la mesa de cama y sacar el profiláctico y el lubricante. Peter sonrió, mimoso y encendido.

-Ahora, mocoso, voy a cobrarte la recompensa.

Logan preparó al joven y se preparó él. Se hicieron el amor como otras tantas veces, sacando a relucir la pasión y el amor que se tenían. Una vez que alcanzaron el orgasmo, se tendieron abrazados sobre el colchón. Peter lo apretó con fuerza. Sabía que al día siguiente Logan partiría y dejarlo ir siempre le provocaba angustia.

........................

Charles ya no estaba más con ellos pero le dejó a David la vida y a Erik motivos para seguir amando y viviendo gracias al niño. Para David fue difícil procesar la idea de que Charles no lo había conocido. Era complicado porque a su edad necesitaba lo palpable, y tenía que asumir que no guardaba ni un solo recuerdo con él. Erik se dio cuenta y se dedicó a contarle anécdotas de Charles para que lo conociera más.

Era difícil para David comprender la tragedia con tres años pero su padre lo ayudó. Erik platicó con los demás y cada integrante de la casa fue aportando historias o comentarios sobre el telépata para que David se hiciera una idea de la clase de persona que había sido y lo que significaba para cada uno.

Pero, claro, no fue fácil para él ni para los adultos. La desdicha se empañaba más con la muerte y eso le causaba miedo. Charles había fallecido y el niño, procesando el tema a su corta edad, temía morir también. Erik se dio cuenta cuando unas semanas más tarde David sufrió una indigestión por exceso de chocolate y la barriguita se le hinchó. Lloró desesperado y exclamó que no quería tener un bebé y morirse, y su padre tuvo que explicarle que nada de eso ocurriría.

Con mucha paciencia y afecto de parte de todos, David se fue conciliando con la tragedia. No podía superar emocionalmente la muerte ni la ausencia de Charles, Erik tampoco podía hacerlo siendo un adulto, pero aprendió a refugiarse en el amor de su padre vivo y en el cariño de todos.

Our Child (Cherik y  Wolversilver)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora