Mientras que en la casa de los Carrington daban la bienvenida a Rosie, los McGraw recibían a Meredith, una pequeña de ojos verdes, con piel blanca como la nieve y cabellos rubios como los rayos del sol. Era simplemente hermosa.
La señora Charlotte estaba sentada en un sillón de la sala arrumando a su pequeña. Era su segunda hija, luego de haber perdido a Chloe.
Cada 15 de Agosto le hacían una pequeña fiesta en conmemoración a la pequeña que había dado su máxima batalla por su vida, pero desafortunadamente no la ganó.
Por fortuna, Meredith había llegado a su hogar para colmarlos de alegría y reparar ese dolor que habían tenido ante la trágica noticia de hace 5 años.
A veces la señora extrañaba a su niña, y le gustaba imaginar cómo hubiera sido tenerla. Apuesto a que hubiera sido muy parecida a Meredith. Con esos hermosos ojos verdes y un cabello muy rubio.
Imaginaba todo lo que pudieron hacer juntas sus dos hijas, ser unas grandes amigas, jugar todo el día, vestirlas muy similar, llevarlas a pasear, ir por ellas a la escuela, etc; pero por tristeza llegaría el día en que le tendría que contar la verdadera historia a Mer.
Si se hubiera salvado Chloe, los señores McGraw no hubieran pasado por esos 5 años de soledad, de tristeza. Pero en esos años aprendieron muchas cosas, muchas lecciones, que sin duda alguna les sería de gran ayuda para educar a su pequeña.
Pero, ¿qué pasaría si les llegara una llamada? Una llamada que les cambiaría por completo su vida, una llamada de la verdad.
Lástima que no sepan que su hija está viva, sino, todo sería diferente.
Perdón por hacer corto el capítulo:( es que no he tenido mucha inspiración, pero prometo que el próximo será más largo, ¿vale? Aparte, no tardare en subirlo, máximo dos días♥️ Gracias por leer :) xx
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Familia equivocada
Mystery / Thriller"Dicen que todos tenemos derecho a tener una vida perfecta, pero qué aburrido sería si en realidad fuera así, ¿no? Desde que naces crees que tus padres son las mejores personas del mundo, que nunca te faltarán, que mientras estés a su lado nada malo...