VIII

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~ LEXA~

- ¿ Qué hacemos ?. Susurra mi esposa.

- No lo sé. Digo sin aún creer lo que acaba de pasar.

- Yo creo que lo mejor es no hacerlo, es nuestra hija. Dice O con preocupación.

- Ya lo sé. Digo y la abrazo.

- ¿ Crees que ella nos odie si no aceptamos?. Pregunta y pienso en el carácter de Clarke en estos días.

- Es lo más probable, pero prefiero que nos odie por no aceptar, a que nos odie por destruir nuestra familia por un momento de pasión.  Digo y O deja de abrazarme.

- Se que tienes razón, pero verla completamente desnuda tuvo efectos en mi. Dice con las mejillas rojas. 

- Lo sé, en mi igual. Digo y O me mira con intensidad.

- Amor, mirame pase lo que pase, siempre vamos a estar las tres juntas. Dice y afirmó.

- Bueno mi amor, llegó la hora de decir a Clarke lo quedecidimos. Digo y tomo su mano.

Ambas salimos y vemos a nuestra pequeña acostada en nuestra cama completamente desnuda pero dormida.

- Parece que mañana le diremos. Dice O mientras arropa a Clarke.

Ambas nos acostamos, ha sido un día largo y ya pronto amanecerá. Dormimos las tres abrazadas.

Despierto primero, me salgo del abrazo de Clarke. Veo a mi esposa abrazar a Clarke justo como hace unos segundos estaba yo. Ambas son mi vida. No podría vivir sin las dos.

- Amor. Susurro a O y ella se queja y abraza más a nuestra hija. Sonrió y vuelvo a intentar.

- Buenos días amor. Dice cuando por fin abre los ojos.
Mira a Clarke y sonríe. Deja un beso en su mejilla y se levanta.

- ¿ Podemos viajar hoy?. Quiero estar ya en Grecia. Dice mi esposa con una sonrisa.

- Sólo si Clarke dice que sí, recuerda que es su regalo. Digo abrazandola. Me siento tan bien en los brazos de mi mujer.

- Bueno mi amor, pidamos el desayuno. Ella toma el teléfono y pide desayuno para tres.

Esperamos que lo traigan y despertamos a nuestra hija.  Clarke se levanta y se da cuenta que esta desnuda. Sonrió y O le presta algo de su ropa.

Desayunamos y ninguna dice nada de lo que pasó ayer. Estoy tentada a dejarlo pasar pero es una conversación que debe quedar clara.

- Clarke, tu madre y yo queremos aclarar lo que pasó ayer. Digo y O toma mi mano.

- Yo lo siento, no volverá a pasar, vamos a olvida todo. Dice Clarke apresurada. Miro a O con duda ella igual.

- Amor, tu madre Lex y yo queremos decirte que te has convertido en una mujer muy hermosa, capaz de despertar nuestros deseos, pero no por eso vamos a tener relaciones contigo, eres nuestra hija. Dice O con cariño.

- No lo soy. Susurra Clarke con voz débil.

- Aunque no lo seas de sangre eres nuestra pequeña. Digo y ella vuelva a negar.

- No quiero que sean mis madres, quiero una familia normal, donde no las ame. Dice ahora con muchísima lágrimas.

Mi corazón se rompe, mi pequeña está sufriendo por algo que nunca va a pasar.

Apartir de esa conversación mi pequeña se alejó de nosotras. Decidió dejar Grecia como último destino.

Con cada viaje sentía que ya no era esa jovencita que nos demostraba su amor. Se volvió reservada y distante.

Tu, Ella, o Ambas ? CONTINÚA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora