*
-despierta-escuché a lo lejos seguido de varios movimientos en mi cuerpo
Me desperté con el ceño fruncido al no saber en donde me encontraba pero al ver a la chica que me despertó lo recordé
-es tu primer día!-dijo vero ya bañada
-desde hace que tanto estas levantada? Apenas son las seis-le dije y ella sonrió
-desde hace media hora, debemos estar listas para tu primer día, que no te emociona ser la nueva? A mi me hubiese encantado, todos se fijaran en ti, hablaran de ti, serás el centro de atención de todos, que emoción!-dijo ella y yo me levanté para empezar a caminar perezosa hacia el baño
-no tardes mucho bañándote que se hará tarde y aún falta arreglarte-me dijo y bufé
-suenas como una madre-le dije desde adentro del baño y la escuché reír.
Me bañe creando en mi mente algunas imágenes de cómo sería este día con mi madre a mi lado
Ella despertándome, diciendo que me diera prisa, preparándome el desayuno y deseandome un excelente primer día
Pero solo se quedó en una tonta idea dentro de mi cabeza pues se que eso nunca llegara a pasar
Después de alistarme con un simple pantalón de mezclilla, una blusa negra junto con mis tenis del mismo color y mi cabello planchado suelto decidí estar lista así que ignorando los comentarios de Vero que me maquillara o me pusiera otra ropa más sorprendente salimos de la habitación
Llegamos a la universidad y vi a Elizabeth platicando con un chico, él de un momento a otro la empujó e hizo que Elizabeth se hiciera para atrás involuntariamente, así que yo sin dudarlo me separé de Verónica y me dirigí hacia ellos, pero justo antes de que llegara el chico la volvió a empujar más recio, se miraba enojado pero eso no me detuvo
-Hey!-le grité sacando mi lado oficial
Ambos voltearon y vi que Elizabeth tenía los ojos rojos
-qué quieres?-me dijo el chico
-por qué la empujaste?-le dije
-qué te importa, lárgate-dijo enojado
-no me iré hasta que me des una muy buena razón de por qué la estas tratando así
-beca, no pasa nada, vete-me dijo Eli
-Eli, nos vamos conociendo pero no dejaré que un estúpido te trate asi, y tú tienes tres segundos para darme la razón que te pedí-le dije y el tipo río
-o si no que?-
-uno...dos....tres-dije y le pegué un puñetazo en la cara y después una patada en sus bajos haciendo que se retorciera del dolor.
-no vuelvas a tocarla-le dije haciéndole señas a Elizabeth con la cabeza para que nos fuéramos
-gracias-me susurró cuando estábamos caminando lejos de aquel tipo
-no agradezcas, y ahora sonríe por que hay unos chicos lindos mirando hacia acá y no querrás que te vean así-le dije y esta sonrió
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La Infiltrada
Teen FictionRebeca Morgan de 19 años de edad quien desde los 5 años ha vivido en un internado, en éste le enseñaron a defenderse, la entrenaron para que fuera una de los mejores soldados del país, salía del internado a cumplir misiones desde los diez años como...