Prisionero De Mis Alas / -Levi X Male Reader (Omegaverse) //CANCELADA//

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Me desperté con un repentino ataque de tos. Fue cuando note que la habitación estaba fría. No había rastro del capitán.

Me pare aun semidormido y me dirigí hacia la puerta, que por alguna razón estaba entreabierta. Justo cuando la iba a cerrar, escuche unas voces provenientes de afuera:

-Tch, es el quinto esta semana, ¿acaso no se aseguraron de dejar a todos los omegas en Trost?

Me sobresalte, Levi se escuchaba muy molesto. Con una ligera brisa me llego su delicioso aroma, lo que me provoco un estremecimiento involuntario.

-Eso pensaba yo también...

Es Erwin, aunque se oye serio parece estar preocupado.

-...al parecer se registraron como betas.

Casi sentí como si se me fuera a parar el corazón.

-Hay que tratar de entenderlos Erwin, los omegas sufren mucho. Sabes lo que les sucede a los omegas que no logran entrar en el ejercito...

Una tercera voz se unió a la conversación.

-Calla cuatro ojos, no es como si en el ejercito les fuera mejor cuando entran en celo.

-Esto casi puede ser considerado fraude de identidad, se castiga con prision...

-Comandante Erwin, ¿acaso piensa enviar a los omegas a la prisión, sabe lo que les..?

-Vaya Hanji, parece que les tienes tanto aprecio como a los titanes...

-Los investigue durante un tiempo para saber si los titanes también tenían celo, tengo una idea de lo que sufren...

-El comandante no nos pidió reunirnos con el para discutir los problemas de los omegas.

-Suficiente

La voz de Erwin se impuso claramente.

-Limitense a preparar todo para la inspección de mañana: tenemos que asegurarnos de que no tengamos mas omegas, esten en celo o no.

Apenas alcanze a llegar a la cama y meterme bajo las sabanas cuando escuche al capitán entrar a la habitación.
Fingí lo mejor que pude estar dormido, pero cuando me llego un nuevo ataque de tos no pude mantenerme con los ojos cerrados mas tiempo.

-Lo último que me faltaba...
¿acaso tienes frio mocoso?

-Y-yo no...normalmente no....

No soy nada friolento, nunca lo he sido y a pesar de eso estoy temblando, aunque no se si sea al cien por ciento causa del frío....

Recordé la conversación que había escuchado y me recorrió un nuevo estremecimiento.

-Oye tranquilo.-Levi tomo algo de la silla y me cubrió con el.- mas te vale no enfermarte o haré que limpies el piso de cada cuarto justo después de disciplinarte.

A saber que tenia que ver la disciplina con enfermarse.

-Duermete ya o tendré que hacer que cierres los ojos de alguna forma.

Obedecí y al cabo de unos momentos empecé a sentir como me perdía. Justo antes de perderme por completo, me pareció sentir un tacto suave: primero en mi cabeza para terminar, según yo, sobre mis labios.