El día que Seokjin debe morir

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-Amor ya regreso.- un beso en la mejilla era la despedida diaria desde hace dos semanas con la cual Taehyung se despedía de Seokjin para ir a ayudar a Yoongi con sus filtros fotográficos.

-Amor, puedes recordarme ¿porque tienes que ir todos los días a ver a  Yoongi?.- dejando sus documentos a un lado y sobando sus ojos un fastidiado mayor.

Taehyung repetía siempre la misma rutina, sentarse en el regazo del mayor, tomar con sus manos su cuello y dándole un beso decirle .- Porque prometí ayudarle con sus filtros, prometimos ser amigos y porque ya falta poco para viajar, no nos veremos más, aparte que aunque se que te incomoda sabes que quiero mucho a Yoongi.- terminando toda esa explicación con un nuevo beso más profundo.

A Seokjin no le gustaba mucho que el castaño vaya todos los días con quien hasta hace poco pensaba era el amor de su vida, pero entendía que él era el novio y no el dueño de Taehyung, aparte que confiaba en su amor, además que pronto ellos se irían y no se verían más con el pelinegro, con todo el trabajo que tenía para dejar sus documentos en orden ni siquiera tenía tiempo para estar con Taehyung así que era una buena idea que salga para no aburrirse dentro de la mansión, sólo lo veía en las noches, porque en las tardes la pasaba todo el tiempo con Jimin y Tadeo, también iba a separarse de ellos y era justo que les diera mucho de su tiempo antes de irse.

-Ok amor, sólo te pido que te cuides.- Seokjin había hablado con Jimin, este le contó todo lo que Namjoon había hecho así que tenía mucho temor por la seguridad del castaño, claro, no le iba a decir nada para no preocuparlo.

Se despidieron con un beso y el chofer llevó a la mansión de los Min a un entusiasta castaño junto a su seguridad particular, Yoongi lo esperaba como todos los días.

Ni bien salió de la oficina Seokjin llamó a los hermanos Park, pidió a Jimin que lo ayude con los papeleos y a Hoseok que vaya como todos los días en otro coche a cuidar los portones de la mansión Min, no se encontraba  tranquilo desde hace varios días por la seguridad de Taehyung.

-Seokjin por favor, no salgas sin la máxima seguridad, con lo que  contó Jimin sobre ese pacto de Namjoon, no sólo está en peligro Taehyung sino tú también, tratará de eliminarte, para él eres un molestia, un predestinado que debe eliminar.- un preocupado pelirrojo presintiendo que el tío de los Min pudiera atacar en cualquier momento.

-No hay problema, como todos estos días hoy no salgo de la mansión, no lo necesito, los socios son los que vienen a verme, te mando a cuidar a Taehyung por precaución y porque aún pienso en Kai que anda suelto, la seguridad de los Min es un punto a favor, sería una doble seguridad para Taehyung y sinceramente me siento más tranquilo que esté en esa mansión, no iré a ningún lado, no hay de que preocuparse.- Seokjin tenía todo calculado para evitar riesgos a quince días de irse con el menor.- necesito acabar todo este papeleo para que en mi partida Tadeo sea quien reciba toda la herencia, no puedo desaparecer de repente, así que en este momento estoy preparando mi muerte... .- asustando a los hermanos Park

-¿Su muerte?.- balbuceo Jimin

-Asi es, mi muerte ¿cómo crees entonces que Tadeo puede tomar posesión de todo?.- observó Seokjin parándose de su escritorio y caminando a la ventana.- toda esta fortuna por la que mi abuelo, mi padre y luego yo forjamos no puede quedar en el aire, Tadeo es un Kim legalmente y será el heredero de todo, confió en ti Jimin.- nombrando al cenizo sin mirarlo.- confió en que ayudarás a mi pequeño hermano como hijo tuyo que es.- sonreía en forma triste.- extrañaré todo, es mi vida la que dejo pero no me arrepiento, por Taehyung haría eso y más.- volteando a ver a los hermanos Park.- Hoseok quedas a cargo de la seguridad total de Tadeo y su padre, vas a ser el jefe oficial de todo lo concerniente a la seguridad personal del nuevo heredero y del imperio Kim, tú sabrás defenderlos como lo hiciste conmigo, nombre a Park Jimin como su tutor legal para asegurar que siempre estarás con él, eso es lo que deseo.- la voz de Seokjin sonaba melancólica pero a la vez segura.

Vuelve por miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora