un charco de agua

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La luz de la luna la golpeó como dos látigos. Abrió los ojos y se irguió violentamente, pero pronto tuvo que volver a acostarse mientras se sostenía la palpitante cabeza.
No recordaba haber bebido, de hecho no recordaba nada de la noche anterior. Se puso de pie y caminó hacia el baño para sumergirse en la tina y así despejar su cabeza, se miró al espejo y se sorprendió al notar que esas dos noches de sueño habían apasiguando su aspecto demacrado, ya no hacia falta el maquillaje.
Ignoró cuanto tiempo estuvo en la tina, sólo mirando al techo; pero fueron los suficientes como para que al salir escuchara los escasos y lejanos pasos de las mucamas y sintiera los rayos de sol iluminar su rostro.
Se vistió rápidamente y se acomodo el cabello en una trenza:

Cuando iba a salir un leve destello le dio en los ojos, dirigió su mirada hacia el causante de aquel resplandor para ver que no era nada mas que SU daga

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Cuando iba a salir un leve destello le dio en los ojos, dirigió su mirada hacia el causante de aquel resplandor para ver que no era nada mas que SU daga.
Sintió esa necesidad de llevarla, su corazon pedía a gritos que la tomara, que volviese a sentir ese reconfortante sentimiento de poder. La miró un minuto, dudando, pensando; acaso estaba mal volver a usar su antigua arma? Aquella que le perteneció a una asesina sanguinaria y despiadada?.

(...)

Thorin salió de la habitación de Tania y se dirigió a sus aposentos rápidamente, en completo silencio.
En cuanto llegó se encerró y se metió en la cama para dormir, mas no pudo al pensar en lo sucedido,
● Tania habia admitido que lo quería
● Lo habia besado y más.
Por otro lado
● estaba borracha.

Le dio vueltas al asunto durante dos largas horas hasta que calló dormido.

(...)

La compania completa se dirigía hacia la entrada del castillo, algunos para partir con Tania y otros para despedirlos.
En cuanto estuvieron cerca lograron distinguir a Sam, vestido con una armadura ligera, una mochila colgando de un hombro y armado con su espada. Retth ataviado con un pantalón y una camisa desgastados, un saco largo hasta los pies, botas de cuero, un báculo parecido al de Gandalf y un bolso. Pero ni rastro de Tania.

- que hacen TODOS aqui?

Preguntó Retth haciendo énfasis en la palabra "todos"

- venimos a despedirlos.
Contesta Balin

- y Tania?

Pregunta Bilbo de golpe

- fue a hablar con el asesino.

Contesta Sam con enojo mal disimulado.

- No tendría que acercarce mucho a él.

Murmura Bilbo mientras miraba hacia otro lado.

- Y podrías decirme porqué no tendría que acercarme Bilbo?

Suelta un voz por detrás de ellos. Todos voltean para ver a Tania acercarce con paso decidido.

- p-pues porque...yo...

- Es un asesino - interrumpe Sam con brusqueda - no es buena compania para alguien que tambien lo fue.

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