Sin Palabras

Capitulo 11.

Lily se colocó de pie una vez y escuchó como la puerta de la casa era abierta, ella había estado esperando a james desde hace casi dos horas sentada en las escaleras que daban al segundo piso de la casa. Había estado con Remus cuando había llegado sirius a la casa y ella, había salido corriendo para recibir a James, pero... su esposo no llegó de inmediato a casa y aunque le molestó bastante aquello evito hacer un comentario respecto a eso. No quería tener problemas con james de nuevo. Quería solucionar todo y ser el matrimonio que era antes.

—B-bienvenido—Murmuró al verlo entrar.

James miró a la pelirroja.

—Hola—Le dijo, cerró la puerta tras él y quito su túnica.

Lily sonrió ligeramente y se apartó de las escaleras al ver como james pretendía subir en ellas.

—Hey... ¿Qué tal te fue?—Preguntó siguiéndolo piso arriba— ¿Q-quieres algo para comer? Debes estar cansado.

—Ya comí, Lily—Respondió a la mujer. Él se había comprado algo de comida junto a la que le había llevado a Severus—No es necesario, tranquila.

La pelirroja asintió, respiró ruidoso, sintiendo un ligero dolor en la garganta.

—Oh, bueno.

James siguió por el pasillo del segundo piso hasta el cuarto de huéspedes que era en donde se alojaba. Lily suspiró.

— ¿James?—Le llamó.

El auror se volteó antes de entrar a la habitación. — ¿Qué?

Lily miró el suelo.

— ¿No me v-vas a preguntar como he estado?—Le preguntó a su esposo, sintiendo las lágrimas juntarse en sus ojos— ¿No vas a preguntar por Harry? ¿O si nos ha escrito?

—Estoy cansado, Lily. Cansado. He estado fuera de casa una semana y media—Le recordó a la mujer con la vivía. Mujer que ya le tenía al borde de la locura—Quiero dormir y bañarme ¿vale? Ya luego preguntaré por esas cosas, no te pregunto cómo estas porque te veo bien.

La pelirroja escuchó como el hombre entraba a la habitación y cerraba la puerta. Lily limpió sus lágrimas y fue hasta la habitación en la cual en algún momento compartió con James. Sollozó en ella y se recostó en la cama, estaba tratando de arreglar todo pero por lo que se veía todo poco a poco empeoraba.

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Lily bostezó justo cuando abrió los ojos al siguiente día. Había cenado en soledad en la noche anterior, aunque había escuchado cuando James había bajado a la cocina para preparse algo de comer.

Bajó de su cama, lavó su rostro y se aseó, decidió bajar a la cocina para preparar el desayuno a james. Seguramente si hacia aquello, él estaría de buen humor y podrían arreglar las cosas y continuar como antes.

Fritó tocino, calentó el pan y lo untó con mantequilla. Frito un huevo, todo aquello lo sirvió en un plato que poso sobre una bandeja, le preparo leche con miel y subió todo aquello al segundo piso, ella también tenía hambre pero podía esperar. Primero quería consentir a su esposo y arreglar todo.

— ¿James?—Le llamó, tocando como pudo la puerta— ¿James? He preparado algo para ti.

Nadie respondió.

—Tal vez... todavía sigue dormido—Murmuró ella, abrió la puerta y entro a la habitación— ¿James?—Le llamó, observó la cama y la encontró vacía. Posó la bandeja en la cama y fue hasta el baño— ¿james?—toco y abrió la puerta.

No estaba.

James no estaba.

Los labios de Lily temblaron, la pelirroja observó mejor el lugar. Había ropa en el suelo y una toalla estaba humedecida sobre uno de los muebles que estaban en el cuarto, James había salido, y por lo que parecía no regresaría en un buen rato.

Respiró profundo y tomó asiento en la cama, sintiéndose completamente desolada.

—James...—Dijo, sintiendo sus ojos humedecerse— James ¿Dónde estás?

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El rostro de James se escondió en el cuello de Severus mientras se movía, ambos estaban sudados y desnudos. James entrecerró los ojos al sentir como su espalda era rasguñada por Severus pero aquello no le importo en ningún momento. Sentía las gotas recorrer su cuerpo, pero la sensación de placer que sentía en ese momento era sublime, le hacía olvidar todo. Le hacía olvidar del mundo en que vivía.

Las piernas de Snape apresaron su cintura, haciendo que su miembro entrara por completo en cada una las penetraciones que daba.

—Sev...—Susurró James, el hombre alzo el rostro y besó los labios del hombre pelinegro bajo el—Te amo, mi amor.

Severus suspiró, mordió sus labios y jadeó al sentir como James golpeaba ese punto que le gustaba, se sentía tan bien.

—Sev...Sev...—Le escuchó gemir, pero de un momento a otro james se detuvo y la posición en la cual se encontraban fue cambiada. Ahora ambos estaban sentados, Severus sobre James y este sosteniéndole de la cintura.

—Amor... si pudieras ver tu rostro. —Murmuró, acariciando su nariz con la suya—Eres hermoso, Sev. Eres tan...

Severus rió al escuchar las estupideces de Potter, aunque tenía que admitir le en el fondo le gustaba que le dijera todo aquello. Acarició el rostro del auror y lo besó, las lenguas se acariciaron y James comenzó a moverse dentro de el con lentitud. Parecía que su cuerpo brincaba sobre la cadera del de lentes.

James deslizó sus manos hasta su trasero y lo acarició, apretándolo con fuerza mientras Severus solo se dedicaba a besarle, James suspiró. Disfrutó de los besos, enterró sus uñas en la cadera de su amor y rompió el beso, observó como Severus cerraba los ojos, el miembro de este se rozaba contra el estómago del auror, satisfaciéndole de esa forma.

—Severus...—Jadeó James, mordió su cuello, escuchándole chillar tanto del dolor y del placer. Sintió los temblores en el cuerpo de Severus olvidándose por segundos de los suyos propios.

El pecho Severus tocó el de James una vez y se sintió venir. Suspiró y le abrazó, sintiendo como el auror se corría en su interior, se quedaron así por algunos segundos. Luego Severus besó nuevamente a Potter y alzó su cadera para sacar el miembro de su interior.

—Merlín, Sev...—James sonrió, ambos se recostaron en la cama y Severus posó su cabeza sobre el pecho de este—Estar contigo, siempre me hace feliz.

Severus rodó los ojos al escucharle, suspiró y mientras se calmaba pensó en todo. Aunque no le comentaba a Potter lo que sucedía. No sabía cómo decirlo.

— ¿Sev...?—Le llamó James.

Snape alzó el rostro para verle.

— ¿Sev... estas bien?—Preguntó.

Severus asintió.

James asintió y acarició su espalda.

—Sev... No sabes cuantas veces he soñado el... estar siempre junto a ti.

El estómago de Severus se retorció al escuchar aquello, porque sabía que una vez y le dijera a James la verdad este pediría el divorcio a Lily. Tenía que buscar una forma de decírselo y de controlar las cosas. No quería llamar la atención, el solo quería estar en su casa y... perder el tiempo como siempre lo hacía.

—¡¿Severus?!—Llamó alguien, pero aquella persona no era James. Aquella persona era...—Amor ya estoy aquí ¿Cómo te ....—La puerta se abrió, Eileen apareció, guardo silencio inmediatamente—Ah....—Expreso al ver a su hijo junto a ese hombre que no le agradada—Señor Potter.

James se sonrojó con fuerza.

—S-señora Snape

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¡Nuevo capitulo!

PDT: XD Lily NO esta embarazada.