Lariat | Stony

- II -

Era apenas media semana y parecía que su vida ya no daba para más. Los únicos momentos que realmente disfrutaba eran cuando se unía al doctor Banner en su laboratorio para trabajar en su armadura, la cual consistía en solo un guante que disparaba a través de propulsores, por ahora.

Esa mañana los levantaron muy temprano, más de lo acostumbrado, porque tendrían un día duro de entrenamiento dirigido por nada más y nada menos que el mismísimo Capitán America. Había escuchado lo estricto que solía ser con los nuevos, pero Tony había decidido que esa sería su oportunidad para atrapar a dichoso Alfa Puro, no podía engañarse con sus sentimiento y nunca estaba demás un buen ligue para quitarse el estrés. Obviamente eso no debía distraerlo de sus responsabilidad para alcanzar la plenitud de sus sueños, pero hoy prometía ser un buen día ¿no?

- ¡Stark, va una vuelta atrasado! - gritó Steve, en modo entrenador, mientras pasaba por su izquierda corriendo seguido de los demás cadetes. No respondió cómo se debía porque al parecer el aire no quería llegar a sus pulmones.

- ¿Dónde quedó el agradable tío Steve de hace unos días? - comentó Carol al pasar a su lado y retener un poco el ritmo.

- Es un Capitán, chicos, deberíamos sentirnos honrados de que siquiera nos haga sudar - refutó el moreno que se acababa de unir.

- ¡No jodas Rhodey! - Carol huyó a velocidad, lo tenía pegado todo el día como lapa.

- Así no, osito - aconsejó el castaño provocando que ambos frenaran sin aviso.

- ¿Qué?

- Que así no conquistarás a Carol. Ella es una Alfa y tú un Beta, tienes que tratar de ser menos intenso, incluso indiferente con ella para que se fije en ti.

- N-no sé d-de qué hablas, ¿q-quién dijo que estaba interesado en ella? - tartamudeo Rhodey e incluso tuvo la sensación de que todo lo demás se detuvo con él, así pareció hasta que Steve les chifló desde la otra punta indicándoles que continúen o darían 50 vueltas más.

- Yo solo digo. Thor lleva ignorando su terrible crush por él desde tiempos inmemorables y funciona para ella - el castaño lanzó una mirada pícara para luego tratar de seguir con las indicaciones.

***

La base de SHIELD para entrenar a los cadetes no era tan grande como pensó. Se suponía que era una de las mejores instituciones de las Fuerzas Armadas donde hacían los entrenamientos más estrictos, misma razón por la que solo habían aceptado unos cuantos, entre los que se encontraban Carol, Rhodey y él, pero aún así nunca espero que tuvieran un ring de luchas, ¿acaso eran salvajes?

- Bien, luego de haber calentado, podemos comenzar con las prácticas de combate - anunció el rubio Alfa, mientras Tony se preguntaba que significaría calentar para ese cabeza hueca - ¿Algún voluntario que quiera enfrentarme?

Tony sin pensarlo levantó su mano y los demás se extrañaron a tal punto que Rhodey le susurró si era consciente de lo que acaba de preguntar el Capitán.

- Tranquilo, es una estrategia de conquista - respondió mientras meneaba sus caderas como un gato a su presa.

- Stark, me sorprende tu entusiasmo - Tony le regalo una sonrisa coqueta al rubio quien le había dado pase al gigantesco cuadrado en medio de lo que parecía ser un coliseo, al voltearse no pudo evitar poner los ojos en blanco por el comentario del Capitán. Steve se mostraba siempre muy serio y correcto, incluso durante los almuerzos cuando Thor y los demás del equipo parecían relajarse un poco del ambiente militar, aún así no eran precisamente esas características que lo atraían sino su lado salvaje, lo había observado entrenado hasta romper los sacos de boxeo y se sabía de memoria su aroma a roble recién cortado o tal vez desgarrado. Fueron esas razones que lo motivaron a ofrecerse, estaba decidido a conquistarlo y hacer que ese Alfa no se olvide de su aroma. No estaba enamorado, era pura atracción química y prácticamente imantada entre ellos; estaba seguro que si él lo había sentido el rubio también lo sintió desde el momento en que sus miradas se cruzaron.

- Bien, tírame un golpe - Steve estiro un poco antes de posicionarse frente al castaño.

- ¿Qué? No pienso golpearte.

- Vamos, solo estamos entrenando, no te preocupes.

- Claro que me preocupo. ¡Qué tipo de Omega sería si golpeó a un anciano! - el resto de la clase se rió por el comentario, el rubio solo hizo ademán de que golpeara directo y encogiendo los hombros hizo caso a la instrucción, tomó impulso con su brazo y apuntó justo al rostro del más alto. Su puño fue detenido con agilidad para luego ser jalado y puesto detrás de su espalda, lo que había motivado a que su cuerpo dé espaldas al rubio quien con un fuerte brazo rodee su cuello e inconsciente terminaran muy juntos uno del otro.

- Te asombraría lo anciano que soy, Stark - susurró a su oído para pasar a explicar sus movimiento al resto. Tony se la pasó como muñeco de entrenamiento durante las siguientes dos horas y estaba más que enfurecido porque no había logrado su cometido de someterlo bajo su encantador aroma o no como lo había pensado por lo menos ya que definitivamente después de tanto sudor él olía a Steve y Steve a él.

- Hazle la llave de Happy - le comentó Carol en voz baja cuando fue por un poco de agua, Tony solo la miro ya que sabía que tarde o temprano su amiga adivinaría lo que trataba de hacer ya que no en vano se conocían tanto tiempo.

- Buena idea, Danvers. Te conseguiré el número de Thor - Tony retornó con ánimos renovados al ring, Steve volvió a pedir ser atacado pero esta vez en vez de tratar golpearlo se hizo como que un calambre atacara su cuerpo, el rubio se acercó preocupado y sin previo aviso, el castaño se lanzó sobre él provocando que su ancha espalda caiga sobre el suelo y encima suyo el pequeño Omega. Fue esa la oportunidad que Tony utilizo para soltar lo más que pudo su aroma, no a un punto descontrolado como en su época escolar sino muy sutil e íntimo como para marcar a Steve. Muchos compañeros Alfas se comenzaron a revolotear por el lugar y lo inesperado pasó, Steve retornó el control de la lucha y se tiró sobre Tony gruñendo al resto del equipo que los que solo les quedó agacharse. El castaño pestañeó un par de veces antes de retomar su típica actitud de niño guay.

- ¿Qué sucede, cariño? ¿No sabes que es inapropiado marcar a tus alumnos? - con eso último Steve noto que habían salido sus colmillos.

- Por está razón no permitían Omegas antes. ¡Hemos terminado por hoy, a las duchas!

Tony se quedó un momento más ahí tirado, mirando como el rubio se retiraba, definitivamente no era la reacción que esperaba puesto que si bien es cierto era normal que un Alfa se descontrolarla ante su aroma no era común que este expulse tal cantidad de su aroma como para alborotar a todo el mundo y mucho menos tratar de marcarlo ahí mismo. Tal vez había exagerado un poco pero no podía evitar la adrenalina corriendo por su cuerpo frente a toda esta situación, él amaba perseguir el peligro y hacer lo prohibido. Pero por otro lado, ¿qué carajos acababa de suceder?

Tendría que tomar una doble ducha helada.

~Blossom