Lisa se levantó de la cama, como ya era costumbre se arregló para después vestir a su pequeño hijo. Lo tomó entre sus brazos delicadamente para no despertarlo. El pequeño solo se removió.Lisa sonrió al verlo. Amaba al pequeño como nada mas en la vida.
— Vamos dormilón, debemos ir al trabajo — aunque no hubo respuesta, si hubo un pequeño quejido por parte del niño.
Lisa rió y dejó al bebé en su cama para comenzar cambiando su pañal y después ponerle uno de los cambios de ropa que Estefer le había regalado. Al ponérselo Lisa pudo notar como dentro de unos días mas ya no le quedaría, Jeonsang crecía de una manera increíble cada semana, y eso que apenas tenía cinco meses.
Al terminar dejó al pequeño quien había vuelto a dormir en su cuna para arreglar las cosas del mismo. Metió pañales, toallas especiales para el pequeño, algunas papillas, unas mamilas con leche en polvo dentro de ellas y algunos juguetes para entretener al pequeño.
Colgó en su brazo izquierdo la pañalera del bebé y lo volvió a cargar. Dio una pequeña mirada al reloj que había en su mesita de noche. Tenía tiempo de desayunar, pero preferiría irse caminando para ahorrar ese día el dinero que gastaría en pedir un taxi.
— ¿Ya te vas cariño? — Estefer estaba en la cocina terminando con su desayuno. Ella se había encargado de ayudar a lisa después de que había abandonado Corea.
— Si, nos vemos en la noche — Lisa cubrió con una cobija a Jeonsang y abrió la puerta.
Amaba mirar a su pequeño, era tan parecido a Jungkook. Justo en ese momento recordó al mencionado chico. ¿Qué habrá sido de Jungkook? se preguntó en su mente. Esperaba que tanto él como Gía estuvieran felices y fueran la familia feliz que siempre Gía había deseado. Miró nuevamente a su pequeño, algún día le tendría que explicar lo que había pasado con su padre, ¿pero que era lo que diría? Que la culpa era de ella por haberse apartado del camino.
— Ey guapa — los lugares donde trabajaba no eran uno de los mas seguros de Tailandia y eso le preocupaba. Se aferró mas a Jeonsang y apresuró su paso tratando de huir de quien sea quien la había llamado.
Unos minutos mas tardes ya estaba llegando aquel restaurante. La dueña del lugar la saludó con amabilidad y tomó al pequeño en sus brazos; ella solía cuidarlo para que Lisa pudiera trabajar.
Por suerte Lisa tenia una jefa demasiado buena y que la había ayudado desde el momento en que la vio entrar con una enorme panza de siete meses.
— ¿Dónde esta el bebé mas hermoso del planeta? — preguntó Jennie, hija de la dueña, quien también tenia un gran aprecio por Jeonsang
— Iré a trabajar — habló Lisa colocándose su delantal.
— Hola linda — Taehyung, el hermano de Jennie y también hijo de los dueños del restaurante la saludó. El chico solía coquetear con Lisa, aunque ella jamás le había hecho caso, aunque le costara aceptarlo aún sentía algo muy fuerte por Jungkook, el pequeño la hacía recordar ese sentimiento cada vez que lo veía.
— Hola — devolvió el gesto. Tomó una de las libretas donde ponían los pedidos y se dispuso a comenzar con su trabajo.
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El pequeño Jeonsang no dejaba de llorar, Jennie había tratado de calmarlo, pero no había funcionado. La situación comenzaba alterar un poco a los comensales y Lisa estaba desesperada por no poder hacer algo. Había mucha gente y solo eran dos chicas atendiendo las mesas, así que no podía tomarse un pequeño descanso para atender a su hijo.
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Buscando a Papá (BAM#2) | Liskook
FanfictionLisa huyó de la vida de Jungkook, ellos debían de ser felices, sin ella a su lado. Ahora Jeonsang es la persona que se encargará de unir a nuestra pareja, pero, ¿qué pasará si Lisa no está dispuesta a ser encontrada? ¿Será un nuevo reto para Gía dej...