A la mañana siguiente.
Amir despierta en la recámara de invitados en la casa de su tío Muhammed, decidió no volver al hotel para pasar la noche.
Sigue muy enojado.
Además, para aliviar desastrosa emoción prefiere pasar más tiempo con su tío, al cual tiene mucho sin ver y visitar, y con el cual se lleva muy bien.
Más que bien, es con el único miembro de la familia Saud con el cual se la lleva excelente.
—¿Y cuándo volverás al país? —Su tío Muhammed le pregunta.
—No lo sé tío, aun no estoy muy seguro, pero supongo que dentro de seis meses cuando me toque asistir al congreso empresarial de las américas.
Su tío asiente y tomando un sorbo de café susurra:
—Hijo, sinceramente tu situación con Mohamed me preocupa. Recuerda lo que hizo conmigo, ese muchacho esta enloquecido por el poder.
—Lo sé, no se inmuto de restregármelo en la cara. Todo lo que hizo contigo y de lo que es capaz de hacer conmigo... me lo dejo muy claro.
—Debes andarte con cuidado, él es de armas tomar. Debes ser sigiloso y estar atento con quien tengas a tu alrededor. A estas alturas de la situación, nadie es de confianza absoluta.
—Sí, me preocupa mi personal de seguridad... ¿Y si los amenaza u extorsiona contra mí?
—Ha eso me refiero cuando te digo que te andes con cuidado, se atentó a todo.
Después de desayunar junto a su tío, y de seguir la conversación por largos minutos más durante el reposo, se despide de este y junto a todo su séquito regresa al Hotel WoodHouse.
*****
Mientras Emily aparca su auto frente a su tienda de floristería, la cual está a solo dos tiendas de su gran hotel, es llamada por su mejor amiga y contesta desde el teléfono del auto.
Ya que nunca le ha gustado conducir y hablar por teléfono con el susodicho en manos.
—¡¡Buenos días Katherine!! —Ella susurra con notable entusiasmo.
—¡¡Buenos días mejor amiga!! ¿Ya vienes? —Ella grita con emoción.
—Sí. —Emily asiente la cabeza— Ya estoy llegando, te veo en mi oficina en un rato, primero pasare por la floristería.
—Vale, está bien. —Katherine exclama emocionada.
Después de estar en la floristería por más de una hora, deja su auto con el parquero del hotel y Emily camina a paso firme hasta recepción, saluda a sus empleados y luego, al llegar a su oficina Katherine la espera sentada en una de las finas sillas frente a su escritorio.
Emily al verla, sonríe y luego suspira cuando la escucha decir:
—Ahora sí... ¡¡Dame todo los detalles!! ¿Qué tal te fue con el árabe allí dentro... en el ascensor? —Pregunta ansiosa.
—Es un prepotente engreído. —Susurra— Y sigo sin soportarlo.
—¡¡Pero estuviste con él a solas por más de dos horas!! —Alza la voz curiosa— ¡¡Algo debió pasar y debes contármelo!!
Emily ríe y luego niega con la cabeza.
—Nada, absolutamente nada.
—¿Qué? —Katherine abre los labios impactada ya que ella esperaba más.
—Sip. Así como lo oyes, al principio discutimos mucho. Yo estaba muerta de pánico y el, lo único que hacía era mandarme a callar. Eso es lo que él sabe hacer —Mofa— Mandar, mandar y mandar.
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Moriría Por Ti © (Disponible en Dreame)
Romantizm¿Qué pensarías cuando una mañana te enteras de imprevisto (Porque la noche anterior andabas de parranda) De que un príncipe Árabe se hospedará en tu hotel de 4 estrellas en vez de uno de 5 estrellas? Para cualquier dueño, administrador o gerente de...