El tiempo pasa.

« Capítulo 10 »

*Marta*

Ya había subido al avión. Ahí estaba yo, en un asiento de un avión yendome para Irlanda. No paraba de pensar, en mi familia y en mis amigos pero sobretodo, en Dani. Nuestra ruptura no a sido porque no nos queramos, al revés, porque nos queremos demasiado como para poder estar sufriendo los dos. Así que así seguiré por un año entero.

Miraba por la ventana y veía como cada vez el suelo se hacía más pequeño. Veía como cada vez me alejaba más de España y como cada vez me alejaba de Dani. Me rompía el corazón irme pero no podía cambiarlo. Ahora no.

Sentía que cada vez me pesaban más los ojos por ayer no haber dormido, culpa de los nervios. Me apoyé en el cristal y cerré los ojos, aliviandome así del dolor que tenía en el corazón al separarme de todo y todos. Al final, caí en un largo sueño.

~~~

Una voz hizó que me sobresaltara

-Pasajeros, han llegado a su destino - «Mierda, que dolor de cabeza».

Bajé del avión y recogí mis maletas. Estaba lista para empezar de cero. Cogí el mapa que tenía y me dispuse a buscar la academia. Buscaba por las calles irlandesas, y no encontraba nada. Pensé en preguntar a alguien, pero no había nadie por la calle asique decidí entrar en algun bar y preguntar. Encontré un pequeño bar a la vuelta de la esquina. Su nombre era «Breaker's». Entré y ahí solo había un hombre linpuando unos vasos y un chico de más o menos mi edad sentado en la barra.

- Hello -saludé en inglés.

- Hi -respondió el chico. Se giró para verme. Era un chico guapísimo, tenía ojos azules y pelo rubio. En sus manos llevaba un libro.

- Any of you talks spanish? (¿Alguien de vosotros habla español?)

- ¿Eres de España? -dijo el chico. «Bien, es español» pensé.

- Sí, menos mal que alguien de aquí sabe español - respondí.

- Bueno, aquí no es que haya mucha gente. -soltó una leve carcajada

- Ya -me senté a su lado- ¿te gusta leer?

- Me encanta -me respondió- ¿y a ti?

-Tambien -sonreí

-Do you want anything for drink? (¿Quieres algo para beber? -interrumpió el camarero.

-A glass of water, please. (Un vaso de agua, por favor.) -respondí

-¿Bueno, de qué parte de España eres? -me preguntó. Al segundo me dió el vaso de agua.

-De Madrid, pero ahora vivo en Sevilla con mi n -me arrepentí de casi decir eso- mi hermana y madre -dije rápidamente- ¿y tú?

-Yo soy de Barcelona, a todo esto. ¿Cuál es tu nombre?

-Me llamo Marta, ¿y tú? -respondí

-Bonito nombre, me llamo Jason. -me sonrojé al que me dijera que tenía un bonito nombre.

-Gracias, tu nombre tambien es bonito. Una pregunta, ¿sabes donde esta la academia de Linguland?- dije

-Claro que sí, yo voy a esa academia -me alegré al que dijera que él tambien iba.

-¡Qué coincidencia! -intenté ocultar mis nervios. No entiendo porque me pongo así con este chico.

-¿Vamos y te acompaño? -me ofreció Jason.

-Claro, gracias -sonreí.

Salimos del bar y me acompaño a la academia. Era un chico muy agradable y se había ganado mi confianza. Me acompaño a la escuela. Firmé unos papeles y me dieron la llave de mi habitación. La habitación 348. Fui, no sin antes despedirme de Jason. Abrí la puerta y vi a dos chicas sentadas en una cama. Eran mis dos compañeras de cuarto. Eran dos chicas morenas, estaban dadas la vuelta asi qué no pude mirarlas la cara.

-Hola -interrumpí su charla.

-Holaa -dijo una da las chicas en tono muy amigable. -Tu debes ser Marta, ¿verdad?

-Si, ¿y tu eres...? Perdon, no me han dicho vuestros nombres. -me disculpé.

-Yo soy Sofía y ella- señaló a la otra chica de ojos azules- ella es Sara. -se presentó

-Encantada

Estubimos un rato hablando, ellas eran de Madrid igual que yo. Se nos pasó el tiempo volando, eran dos chicas muy simpáticas.

-Marta, ¿tienes novio? -preguntó Sara.

-Tenía...-hice una mueca- lo dejamos ayer

-¿Y eso? ¿Quién es? -esta fue Sofía en preguntar.

-Se llama Daniel y lo dejamos porque iba a venir aquí. -bufé- le echo de menos...

-Es normal, yo hecho de menos a mi novio. -dijo Sara

-Huuy, ¿tienes novio? -la miré con una sonrisa pícara- ¿quién es? Ehh pillina

-Se llama Sergio -sentí un escalofrío al oir ese nombre. Mi hermana había sufrido mucho por un chico que se llamaba igual.- ¿le conoces?

-¿Como se apellida? - yo ya lo sabía. Se llama «Sergio Gómez Pérez.»

-Gómez Pérez. ¿Porqué? -preguntó

-Al parecer el mundo es muy pequeño...

-¿Qué? -dijo Sara confusa.

-Conozco a ese chico, y sobretodo, mi hermana.