Capítulo 7

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IVY


Después de algunos días de no haber hablado con mi madre decidí salir con unos amigos de la facultad   ya que los había tenido olvidados por lo que salí de mi encierro autoimpuesto para que nadie preguntara por los raspones y moretones en mi cara.


A su vez no he sabido nada de mi tonto hermanastro el muy cobarde después de su amenaza desapareció y no ha vuelto a casa ya que lo de mis golpes se los debo a él por llevarme a ese lugar como me dan ganas de matarlo será un gran placer para mí.


Para que ni siquiera se digne en dar la cara el muy imbécil tengo que dejar de pensar en él lo que importa es que voy a pasar el rato con mis amigos y tratar de ponerme al día con todo lo que ha pasado no sé qué es de sus vidas y quisiera distraerme un buen rato.


Con ello en mente me encontré con ellos en una cafetería cerca del campus hacia un buen clima por lo que decidimos salir hacia las sillas que hay fuera de la cafetería y charlar de las cosas que me he perdido por mi pequeño accidente.


—¿Que paso contigo Ivy en toda la semana solo se supo que tuviste un pequeño accidente, te encuentras bien? —dijo Janet


Sabía que mi noticia o chisme no iba a pasar desapercibido por mucho tiempo, aunque le di una semana, pero tarde o temprano tenía que enfrentar la realidad y las preguntas curiosas de todos a mi alrededor era algo que debía esperarme con lo que me paso.


—En lo posible no quiero hablar de ello, más bien olvidarlo, pero una cosa comprendí con todo esto y es que odio a Jay Larzon más que nunca.


Las siguientes horas pasaron volando hablar con ellos era gratificante pero no llegaban al nivel de amistad que tengo con Jean, pasar el rato con ellos es divertido y me distrajo de la furia que sentía contra mi hermanastro o al menos disminuyo un poco.

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Al llegar a casa todo estaba oscuro y tranquilo pero un pequeño ruido me llamo la atención y precisamente venia de mi habitación, espero que no sea ¡¡¡un ladrón en especial uno de bragas!!!  Que imaginación la mía tengo que dejar de ver tanta televisión.


Subí sigilosamente por las escaleras no sabía que iba a pasar, pero espero que mis años de defensa personal sirvan de algo ya que mis padres me decían que, si algún momento ellos no estaban, al menos sabría defenderme y era momento de ponerlo en práctica.


Llegue cerca de mi cuarto lista para atacar hasta que note una silueta familiar, por supuesto tenía que ser él sea lo que sea que esté buscando no tiene derecho a hurgar entre mis cosas así que con rabia lo enfrente no tenía derecho a estar allí entre mis cosas.


—Disculpa si estás buscando drogas no consumo por lo tanto no tengo, si buscas licor en tu casa tienes una destilería quien sabe dónde y si buscas condones están en el botiquín detrás de los espejos de los baños—mi voz hizo que se cayera al piso asustado.

ENTRE TU Y YO NADA SERÁ IGUAL EDITANDO ©️✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora