Capítulo 33

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IVY

Cuando desperté en el hospital todo me daba vueltas, mi madre vino toda asustada y con ella también llegaron Lucían y Jay, se lo veía tan sexy que me daba ganas de comérmelo a besos aquí mismo en el hospital.

-Hola cariño como te sientes? - dijo mi madre abrazándome.
-Buen susto el que nos diste Ivy-dijo Lucían
-Espero que te mejores preciosa - dijo Jay

Todo aparentaba como si fuéramos la familia feliz, pero algo no encajaba en esta historia, todos parecían robots en vez de humanos y me veían como si me fuera a romper en cualquier momento.

Era como repetir la escena del funeral de papá todo el mundo ponía cara de compasión o hipocresía, me sentía incomoda cuando la gente lo hacía, no quería la compasión de nadie ese tipo de gente era la que más me enfermaba.

-Podrían dejar de mirarme así? no me voy a romper ni nada por el estilo-dije tapándome con las mantas.
-Lo sé cariño pero nos preocupaste cuando desapareciste-dijo mi madre con cautela
-Mamá estoy bien, tampoco me secuestraron por mucho tiempo, gracias a Jay estoy aquí, no es así?.
-Precisamente por él es que estás así, por su inmadurez , te metió en sus mierdas-dijo Lucían con tono mordaz
-Gracias viejo por la información pero quiero hablar con ella a solas sobre este asunto-dijo Jay.

Nuestros padres salieron a regañadientes, se sentía que no querían dejarme a solas con él y a su vez Jay parecía muy nervioso por la conversación, que quería decirme? estaba segura que no sería nada bueno.

-No se por donde comenzar es muy difícil hablar de mi pasado con alguien.
-Tranquilo todos tenemos nuestro propio pasado, doloroso o feliz, así que mejor comienza desde el principio.
-tengo miedo de que si te cuento ya no me veras como lo haces.
-Mira todos tenemos secretos o problemas que nos es difícil abrirnos pero si no lo haces tarde o temprano explotaras.
-Por lo visto ves el lado positivo de las cosas Ivy- dijo con una sonrisa burlona.
-Sabes que, todo llega a su tiempo, de acuerdo? pero tendrás que decirme lo que te pasa tarde o temprano.
-Es un trato pero por ahora dedícate a descansar dicen que dentro de unos días ya puedes salir de aquí.

Después de ello Jay se subió a mi cama y nos quedamos callados no era precisamente un silencio incómodo, de vez en cuando Jay me daba pequeños besos como también me abrazaba me sentía segura junto a él.

*****

Tal y como dijeron después de unos días salí del hospital por que ya me estaba volviendo loca con tanta gente yendo y viniendo, sentía que no tenía privacidad, obviamente nuestros padres y Jay nunca me dejaron sola.

Era un poco pesado tenerlos las veinticuatro horas los siete días de la semana me tenían un poco asfixiada con tantos cuidados ni siquiera podía salir si no era con uno des.

Así que ideé un plan para poder disfrutar de la ciudad sin chaperones a mi alrededor, ya con una sudadera, pantalones pegados a mi cuerpo y unos tenis decidí escabullirme.

-Si pensabas salir sin ser vista pues no lo lograste hermanita.
-Shhh estoy cansada de esta cárcel así que no digas nada.
-Jugando a la chica mala? me gusta, así que te ayudaré, así que quítate eso y toma mi chaqueta así no llamarás mucho la atención.

-Si claro y por que quieres ayudar después de todo tu te alejaste de nuevo.
-Tenía mis razones pero no quita que te acompañe a hacer cosas malas como tu hermano.

Creo que se me olvido decirles que desde el día en que salí, Jay actuó como un hermano mayor responsable y evitaba a toda costa el que nos quedemos solos, si, hemos vuelto al principio otra vez.

Pero acompañarme a hacer travesuras era algo distinto creo que estamos en la misma página, al menos me conformaré con ello por ahora, aunque la carne sea débil espero realmente volver a ser lo que éramos.

ENTRE TU Y YO NADA SERÁ IGUAL EDITANDO ©️✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora