Capítulo 14: Una última copa.

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Sábado 8:30 a.m.

-Carlos, es muy temprano. ¿Qué coño quieres? ¿No tienes cuando llamar?

-Era para decirte que anoche les envíe las instrucciones a los camareros y al resto del personal.

-Guay, y eso ¿no podía esperar? Me acosté tarde revisando la autopsia y buscando locales donde pudieran usar los sellos que esos dos tenían en la muñeca.

-Lo siento, no lo sabía.

-No pasa nada, ya da igual.

-¿Queda algo por hacer?

-No, está todo. Marta ¿va a venir?

-¿Marta? de momento creo que ni pagándole pondría un pie allí. Ahora la llamaré para que esté al corriente de las cámaras de seguridad, y sobre qué debe buscar exactamente.

-¿Las de las salas de juegos también las va a revisar?

-¡No por Dios! solo las del exterior y la de la zona de copas y la pista. Quedamos que las cámaras de la sala de juegos son confidenciales, salvo en casos de emergencia o si alguien sospechoso entra en ellas. Lo que esa gente haga ahí dentro me importa muy poco, no quiero ver nada, a no ser que sea estrictamente necesario.
Oye, ya que me has despertado, cuéntame ¿qué tal los camareros? ¿Hay alguien nuevo?

-Sí, una chica. Perdimos un camarero y ahora hemos ganado una chica.

-Seguro que hemos salido ganando entonces, y qué tal ¿bien?

-Sí, un poco impresionada y eso. Pero bien. Todos estuvieron bien, llegaron a su hora y respetaron los intervalos.

-¿No viste nada raro en ninguno?

-No, los revisé bien en los cinco minutos de rigor que acordamos, ninguna marca, nada que deba preocuparnos.

-Ok.

-Alba...

-Dime.

-¿Qué quieres que me ponga esta noche? -pregunta riéndose-.

-Ah, lo que tú prefieras. Ya sabes que tienes que ser mi perrito faldero, así que juega con tu imaginación.

-Vale, muchas gracias por la ayuda.

-No hace falta que te pongas nada espectacular, ya sabes que no me gusta llamar demasiado la atención y además, la inauguración va a ser algo informal, ya lo sabes. Una especie de toma de contacto. Lo divertido será la semana que viene.

-Yo sigo pensando que es pronto para organizar algo así de aquí a una semana. Acabamos de reabrir. Creo que quieres ir demasiado rápido.

-Ya hemos ido demasiado lento mucho tiempo, Carlos. Me estoy jugando mi puesto y posiblemente mi vida también. Necesito darle carpetazo a esto cuanto antes, y todo lo que sea avanzar será bienvenido.

-Como quieras, tú mandas. Ya no te molesto más. Nos vemos esta noche, Lady Queen, ponte guapa.

-Lo mismo te digo. Hasta esta noche, Sir Right.

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Sábado, 19:30 p.m.

Mi doble me envío esta mañana, una carta de bebidas y he estado practicando un poco, alguna vez he tenido que fingir ser camarera y no se me da mal, tengo algo de experiencia. Tienen una carta bastante amplia y otra cosa interesante son los precios, con razón Miki me dijo que algunos preferían emborracharse en el local de arriba, normal.

Bueno, voy a recoger un poco esto, mi salón parece una licorería. Le doy de merendar a mi camaleonsito precioso, me ducho y me preparo para irme. Estoy nerviosita y todo.



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