•Margaritas• / Taemin

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         Esa misma noche Taemin se reunió con su hermano Onew,estaban en la sala tomando un café,Taemin seguía escribiendo su libro mientras que Onew lo miraba aburrido.

-¿Ya le pediste matrimonio?-Pregunto él mayor.
-No, y no lo haré todavía- Murmuro,tomó su pipa y la llevó  a sus labios.
-Demonios Taemin, solo pídele la mano y ya,te casas con ella,tienes hijos y luego te acuestas con las demás mujeres- Dijo enojado. Taemin miro a su hermano con asco.
-Que desagradable fue tu comentario- Susurro.
-Es así la vida,Taemin,no todo es de color de rosas-
-Pues yo quiero casarme con ella,quiero que ambos estemos enamorados- Golpeó la mesa.
-Nadie se casa por amor,nadie ... Solamente hay que seguir nuestra tradición- Tomó un poco de su café.
-¡PUES AL DIABLO CON LA TRADICIÓN!-Rompio su propia taza de café-YO QUIERO ¡SER DIFERENTE,QUIERO QUE MI FUTURA FAMILIA SEA DIFERENTE!-
-¡ESO NO VA A PASAR,TAEMIN!-Onew le dió un puñetazo en el rostro,Taemin cayó al suelo y lo miraba desde ahí-Son mujeres ... Ese es su maldito destino, así debe ser-
-Tienes hijas y una mujer- Susurro- ¿Y así piensas? ¿Qué pasará con tus hijas? ¿Las venderlas al primer idiota que se te crucé? Creí que eras diferente a papá ...- Limpio la sangre que salía de su boca-Pero me equivoqué,siempre me equivoco- Suspiro,tomó su libró y subió a la segunda planta.

     Tocaba su guitarra mientras veía la gente de la plaza,él Señor Olmos había llegado y decidió hacer una fiesta. Ese hombre era él gobernador del pueblo.
    
         A la mañana siguiente,Daniel salió a la granja de los Choi junto con su hijo Arturo. Daniel estaba cosechando las lechugas que había plantado él mismo.  Mientras que Arturo  araba la tierra que ya se había cosechado.

-¡Daniel!- Él hombre miro a su patrón y se acercó rápidamente.
-Señor Choi,¿Que necesita?- Pregunto animado.
-Debemos hablar sobre algo importante- Lo tomó del hombro y lo dirigió a su casa.
       Una vez dentro de la casa, Daniel y su jefe se sentaron en la mesa.

-Bien,Daniel,usted sabe mejor que nadie que ... Las mujeres se deben casar,¿Verdad?- Daniel asintió levemente.-Genial, sabes ... Hay algo en tu hija Sarah que me encanta y a mi muchacho también- Daniel había tomado el hilo de la conversación y sabía lo que su patrón quería- Te voy a pedir que cases a tu bella hija con mi muchacho- Daniel lo miro a los ojos y suspiro.
-Señor ... No puedo esposar a mi hija con Minho,ella ya tiene un pretendiente y dentro de poco se casaran- Él Señor Choi golpeó la mesa con toda su fuerza y miro a Daniel.
-Vas a casar a Sarah con Minho,porque sino tus hijas y tu mujer y tú estarán muertos- Murmuró cerca del rostro del otro hombre.

        Llegó a la tarde noche a su hogar,abrió la puerta desesperado por entrar y alertar a su familia de lo ocurrido.

-¡MARTHA! ¡NIÑOS VENGAN!-Grito desde abajo,tomó un vaso y lleno de  vodka. Se sentó en el sofá esperando a que alguien de la familia llegará.
     Bajaron sus tres hijos y su esposa salió de la cocina corriendo,todos estaban frente al viejo de la familia.
-Tengo malas noticias- Murmuró.
-¿Qué ocurrió? Daniel- Pregunto Martha.
-Mi patrón quiere que casemos a Sarah con su hijo Minho- Daniel levantó la mirada y vio a Sarah quien se mordió el labio inferior de la rabia.
-Yo ... Le dije que no podía y entonces él me amenazó con hacerles daño- Marlene abrazo a su madre mientras escuchaba el relato de su progenitor.-Lo siento,Sarah- Todos en esa familia sabían que los Choi era una familia malvada,buscaban y matan por conseguir tierras y tratar de ser mejor que los Lee. Hasta amenazaron al gobernador de quitarle a sus hijas con tal de tener el poder,pero eso fallo ya que metieron al Señor Choi en prisión.
     La puerta fue tocada y Martha la abrió rápidamente. Sarah miraba a su padre quien tenía la mirada en el vaso lleno de alcohol,ella se arrodilló frente a él y acarició sus piernas.
-Lo siento mucho mi niña- Susurro y acarició la mejilla de su hija.
-Lo haré por ustedes,por su bien estar- Sonrió con tristeza la muchacha.
-Familia, estamos invitados a una celebración este  viernes en la tarde, se casará la hija de la familia Pérez- Martha dejo la invitación sobre la mesa y  miro a sus hijos.
-Deben estar invitados los Choi- Mencionó la hija menor.
-Si,es muy obvio- Dijo Lucas.

    
        La  noche había caído en la casa de los Lee, ahí se encontraba Taemin y su padre cenando. Había un horrible silencio en la sala.

-Hijo ...- Taemin miro a su padre-¿Ya has visto alguna mujercita?- Pregunto.
-No pensaba decírtelo pero si,ya se con quién quiero casarme padre- Él hombre sonrió ampliamente y beso la frente de su hijo.
-¡Bien ahí mi muchachito!-Celebro- ¿Y quién esa joven?- Pregunto interesado.
-Es Sarah la hija de Daniel ...- Murmuró.
-¡¿QUÉ?!-Taemin de mordió el labio inferior.-¿Esa mocosa? Por Dios, hijo, esa muchacha es una muerta de hambre como su familia-
-Padre,te pido un poco de respeto,por favor, ella es una mujer trabajadora,se levanta a las cinco de la mañana y viene a vender a la plaza y luego se debe ir a trabajar a la porquería de los Choi- Él padre del joven suspiró.
-Esta bien,lo siento, la verdad es una maldición trabajar con esa gente.-
-¿Por que odias a los Gómez? Padre- Pregunto el jovencito.
-Porque su padre era un hombre trabajador y cuando Sarah debia casarse no quiso y yo quería que ella se casará con Onew, entonces Daniel me golpeó y me grito,dijo que ella era una niña y que no la casaría con Onew- Tomó un poco de su whisky.
-Pues tenía mucha razón,pero tampoco era para pelear ... -
-Lo se, y luego de eso se largo de mi finca y se fue a trabajar con esos ladrones de los Choi- Mencionó algo amargo.- Daniel trabaja como un animal,hacia muchas cosas y no le importaba si llovía,si había viento,él venía a trabajar- Sonrió él padre del joven.-Es un buen hombre.-