Entonces Liam te miró, te besó y te abrazó.
-¿Estas preparada?
-Si. -Giró el picaporte.
-Tira tu primera. -Caminaste por el largo pasillo de la suite del hotel.
Mientras caminabas hacia una sala iluminada que estaba al final del pasillo se escuchaba una guitarra y a alguien cantando, ese alguien era Zayn, conocías su voz, como la de todos los demás, sentías mariposas por el estómago, te giraste para comprobar si Liam te seguía, el te sonrío y te dijo que siguieras, que estabas a pocos pasos de conocer a tus ídolos, cogiste aire y te dirigiste hacia la sala, al llegar los vistes allí, Harry y Louis estaban con el ordenador, mientras Niall tocaba la guitarra y Zayn cantaba una canción de Ed, te miraron, dejaron de hacer lo que estaban haciendo, vuestros ojos se cruzaron, quisiste llorar, pero no lo hiciste, no ibas a ser patética, el tiempo te pasaba muy lento, viste que Harry y Louis te estaban diciendo algo, pero no los escuchaste, era como si todo lo que estuviera pasando fuera un sueño y tu fueras sorda, entonces Liam apareció por detrás y te dio la mano, reaccionaste.
-Decía que estamos encantados de conocerte porfín __(tn) -Dijo Niall
-Eh yo, eh, yo -No sabías que decir, te estabas poniendo nerviosa -El, el placer es mío, pue, puedo. -Zayn te vino a abrazar, olía a ángel él era un ángel todos ellos eran ángeles, entonces todos te vinieron a abrazar.
Los nervios se te quitaron, después de ese largo abrazo se te había quitado la vergüenza y estabas dispuesta ha hablar con ellos durante un largo rato.
-Bueno, así que tu eres la famosa __(tn) de que tanto Liam nos ha hablado. -Dino Harry con una sonrisa pícara.
-La misma -Dijiste sonrojada
-¿Y que, ya estáis saliendo, no? si no, no estarías aquí, supongo. -Dijo entonces Louis.
-Bueno, em, si.
-Tranquila, lo mantendremos en secreto, queremos lo mejor para ti -Dijo Zayn.
-Gracias, de verdad.
-Bueno, dejemos de lado este tema, __(tn) no ha venido hasta aquí para eso, ella solo quiero conoceros.
-Lo sabemos -Dijeron a coro
Estuvisteis hablando durante más de una hora, te tocaron unas cuantas canciones y te dieron su número, eran tan agradables, tan guapos, tan, tan, perfectos, con esas sonrisas de lado a lado de la cara y esos ojos que se les iluminaban cuando hablaban, y esos pelos, peinados al milímetro.