Simples Memorias... (Algo Perdido-Parte II)

Ya no hay vuelta atrás

Gray fue el primero en beber mucho más alcohol que los demás. Sería padre, eso no me lo esperaba pero Juvia había conseguido al fin su amor. El tan solo pensarlo hacia que una sonrisa se formara en mi rostro

-¿Por qué esa sonrisa tan inesperada? -El rubio se había acercado

-Solo un recuerdo

-Cuéntame -Reposó sus brazos en la barra tomando asiento

-Juvia siempre solía ir tras Gray pero no le hacía caso. Es una gran sorpresa su embarazo, me alegra por ambos -Volví a sonreír

-Aún sigue pendiente lo que te pedí aquella noche -Lo observé de inmediato recordando lo que había pedido

-Es-

-¡Sting ven aquí! ¡Es hora que conozcas a todos! -Erza jaló de él inesperadamente logrando perderse entre tanta multitud. Otro hijo eh...

-¿Puedo acompañarte? -Aquella voz.

-Si -Lissana

-Cuanto tiempo pasó desde que tuvimos este tipo de reunión -Ella estaba tan tranquila

-5 años Lucy -Ella bajó la cabeza sonriendo tímidamente

-Desde tu ausencia. Nadie se animaba a preparar estas cosas pero al fin llegó este prodigioso día por el que esperaba -Ella tampoco era la misma

-¿Cómo está tu pequeño? -Ella nerviosa no sabía que responder

-No actúes así. Soy una vieja amiga, no una desconocida Lissana -Ella giró la mirada hacia mí y le sonreí

-Nash está bien. Pregunta mucho sobre algunas cosas y aveces me recuerda a ti. Es tan curioso -Suspiró mientras hablaba maravillas de su hijo

-Espero verlo de nuevo -Asintió

-Lucy. ¿Tu tienes hijos?

-Dos pequeños -Mirajane nos alcanzó dos copas desde el extremo

-Deben de ser tan afortunados de tener una gran madre -Me sentía alagada pero no. No era una madre perfecta, a excepción de Sting. Era un padre de ensueños

-Desearía que algún día se conocieran. Serían muy buenos amigos -Sería genial ya que. Hikari y Nash eran hermanos de sangre, aunque aún no se me pasaba por la cabeza hacérselos saber

-¿Lucy? -Le presté atención saliendo de mis pensamientos

-Estabas tan perdida

-No... solo pensaba un poco -Ambas nos reímos un poco hasta que volvimos a un tema poco agradable

-¿Ya hablaste con Natsu? -No lo esperaba

-No. -Suspiré rendida

-No puedo aclarar las cosas cuando él, sigue aferradose a nuestro pasado -Debía de olvidarlo o nunca estaría tranquila

-Es porque... él nunca dejó de pensar en ti, Lucy -Su sonrisa se esfumó mostrando una solitaria seriedad

-Siempre piensa en ti. Después de tantos años sigue al pendiente de ti. Me casé con él solo por mi embarazo, pensé que lograría algo con él pero no fue así -Su relación no iba bien

-Él aún te ama -Lo negué de inmediato

-No por siempre. Y tú me ayudarás -Haría lo posible para lograr que su matrimonio funcione. Y así él fuera feliz

Le sonreí y ella hizo lo mismo. Sabía que ella no era tan mala persona y nuestro pasado se quedaría ahí.

Bebimos un poco más y los efectos del alcohol ya hacían efecto. Lissana comenzaba a reír de cualquier cosa que le decía y me provocaba gracia. Mientras yo solo la observaba.

-Lucy -Sting me llamaba

-¿Ya nos vamos a casa? -Asintió bostezando

-Pero ella -No podíamos dejarla sola

-Me encargaré yo -Mirajane la tomó del hombro

-Gracias Mira -Le sonreí y nos fuimos despidiéndonos de todos adecuadamente

-¡Lucy escogiste a un buen hombre! -Cana estaba muy ebria

-¡Es-estoy tan feliz por ti! -Erza también lloraba

-Creo que ya deberíamos irnos -Sting me susurró y asentí

Volvimos a un gran silencio. Era la 2da vez que pasábamos por el mismo camino a casa. Nadie se dignaba a siquiera mencionar una palabra

-La mujer con la que estabas

-Si. Era su esposa -Dije algo nerviosa

-Una buena mujer -Lo vi extrañada

-¿Qué? -Caminé más rápido dejándolo atrás. Me había molestado su comentario ¿Por qué? Era una buena madre sí pero... estaba enojada

-Lucy espera -No lo quería escuchar

-Descansaré -Llegamos a la mansión y subí de inmediato. No quería verlo

-Abre la puerta -Le puse seguro. Esta noche él dormiría en el cuarto de huéspedes

-¿Por qué esa actitud? ¿Dije algo malo? -No quería escuchar algo así. No de él

-Tiraré de la puerta si no lo abres Lucy -No era capaz

-A la una, a las dos -¿O sí? Corrí abriéndolo de inmediato pero volví a la cama sin verlo

-¿Por qué la molestia?

-No preguntes más -Oí su respiro y sentí su presencia al lado de la cama

-No pensé que unas simples palabras te pusieran de mal humor -¿Se había dado cuenta?

-Hasta mañana -¿No iba decir más?

-¿Por qué te vas? -Él no giró quedándose en la puerta

-Mañana me darás una respuesta. Y quiero que lo pienses bien, no te causaré mas molestias hasta ese momento -Cerró la puerta y se fue

Estos cambios se me eran extraños. Él no actuaba así ¿Y la respuesta? Oh Dios. Ahora no podría pegar un solo ojo en toda la noche

-Ahora que volví a verlos. Esto será complicado -Abracé la almohada con fuerza

-Que debería hacer -¿Quedarme? ¿Irme? Si me quedaba, debía de buscar una solución con Natsu pero si me iba... creo que esta vez no volvería solo en 5 años

¿Buscaba acaso una excusa para no aceptar el hecho que Sting se alejaría de mí? No. Eso no podía pasar, no quería que pasara. El tan solo pensarlo... ¡Definitivamente no!

Bajé de las escaleras casi corriendo. Él estaba en el despacho de papá ¿Qué hacía allá?

-¿Sting? -Estaba sentado observando un álbum. No recordaba que había uno ahí

-Lucy -Se me enfrió el cuerpo. ¿Sabía que estaba espiándolo?

-No creo poder alcanzarte -No había sentido mi presencia pero ¿Qué murmuraba?

Se levantó y vio el gran cuadro que había en la pared arriba de la chimenea

-Ustedes. Harán que ella haga lo correcto... aún si no es feliz conmigo, prometo cuidarla -¿Él se rendía?

-No quiero perder el tiempo

-¿Qué? ¿No estabas enojada conmigo?

-No. Bueno sí pero eso no importa. Volveremos a Inglaterra

-No quiero que te sientas presionada. Hice mal en darte un limite para responderm-

-No se trata de eso. Quiero continuar con nuestra vida, tal y como era antes. Juntos

No necesitaba pensarlo más. No tenía ni por qué pensarlo

-¿Estás segura?

-Si quieres que opine lo contrario. Házmelo saber -Sonreí