La ley de Murphy

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Octavia hacia estiramientos frente a Lexa, ella estaba colocada de forma que los rayos del sol, que atravesaban la ventana, dejaran ver solamente una silueta.

- Entonces se llama Costia

- Así es

- ¿Como se conocieron?

Octavia llevaba buen rato preguntándole sobre su vida, era bastante persistente y Alexandra solo respondía desenfadadamente, recostada en el frío suelo usando sus brazos como almohada.

El cálido sol la adormilaba lentamente, por un rato estuvo tranquila, nada de rugidos, personas gritando al ser desgarradas por esos monstruos.

- Mejor cuéntame sobre las  "oleadas de electricidad"

- Primero termina de responder mis preguntas

- Eso no es justo

- La vida no es justa

- Te lo diré si me cuentas por que estabas encerrada aquí

La chica respondió con un gesto de fastidio, jalo una silla con llantitas y comenzó a dar vueltas en ella.

- Mi hermano mayor y yo quedamos huérfanos en el momento en que nací, crecimos y nuestras necesidades también, los dos conseguimos un trabajo, solo que el mío suele causar algunas molestias en los demás, digamos que los mensajeros en bicicleta no tienen buena reputación, eso y que la poli me ha agarrado rencor por practicar parkour en el parque de atrás.

- No estoy segura de creer que solo por eso estas aquí

- Solo omití un par de detalles

- ¿como?

- Como que algunos paquetes eran algo ilegales, y que el parkour lo utilizaba para escapar de los regordetes de traje azul y con la palabra "corrupto" tatuado en la frente

Lexa sacudió la cabeza ante las palabras de la chica, atrapaba su atención lo diferente que eran las dos, pero hasta ese punto se llevaban bien. Se levanto en cuanto las luces de la comisaria regresaron, fue directo a un enchufe y conecto el celular al cargador que había encontrado en un escritorio.

- Vamos, prende - rogó al aparato

- Debes esperar un poco, a que agarre carga

- Lo sé, solo necesito que lo haga rápido

La luz se fue minutos después pero el móvil no obtuvo la suficiente carga como para permanecer prendido.

- Joder...

Octavia comenzó a ver como todo a su alrededor se distorsionaba, la voz de Lexa parecía ser artificial y neutra, un segundo despúes estaba en el piso boca abajo, podía ver lo que pasaba pero su cuerpo no reaccionaba.

Lexa la reviso de pies a cabeza pero tenia idea de lo que le pasaba.

La luz volvió y una alarma comenzó a sonar, era diferente a la de un auto y parecía provenir desde dentro del lugar. Se levanto y busco en un computador las cámaras de seguridad, un chico había pasado por el detector de armas y estas habían saltado.

A la alarma se le unieron una serie de rugidos, la "chica popular" corrió hacia la ventana y vio como se formaba una multitud y se dirigía hacia la puerta de la comisaria.

- Claro, por que una desgracia no puede venir sola

Retrocedió y tomo las dos mochilas, guardo su móvil y cargador en una de ellas.

Bad SignalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora