Me costó asimilar donde estaba cuando abrí lo ojos, por lástima todo era real, el domingo me había pasado el día leyendo y viendo películas en el portátil, no quería salir de la habitación y nadie me obligó a hacerlo por lo que en ese aspecto me dejaban tranquila.
No me apetecía nada ir a clase pero tenía examen de historia y no podía permitirme suspender, decidí ducharme para despejarme aunque no se si sirvió para mucho porque no pude evitar pensar en lo que había ocurrido, había tenido que rendirme y acabar accediendo a mudarme, pero lo que realmente mi mente estaba pensando era en Jake, en ese beso y esa realidad que vi en sus ojos.
-¿Lena? - era... ¿Erik?
- Estoy duchandome, ahora salgo - teníamos que hablar de muchas cosas, pero no habiamos tenido oportunidad, aunque ahora tampoco fuese el mejor momento.
Me vestí rápido y salí.
-Hola - dije abrazandolo, estaba algo mosqueada pero lo necesitaba.
-Hola - dijo devolviendome el abrazo.
-Tenemos que hablar
En cuanto escuchó esas palabras sus brazos se tensaron.
-Lena... - estaba nervioso, pero ¿por qué? - ¿podemos dejarlo?, hacer como si no hubiese pasado nada.
¿Hacer como si no hubiese pasado nada?, en tan sólo dos días había pasado de todo y ni si quiera había tenido una llamada suya, lo olvidarse de todo no iba a ser una opción.
-No Erik, tenemos que hablar y lo sabes.
-No tenemos nada de que hablar, de verdad que es mejor dejarlo como está, si no confías en mí y quieres que me aleje lo entiendo, pero si quieres que sigamos siendo amigos será mejor que pases del tema - lo estaba diciendo tan serio que no me quedó de otra que aceptar, podía averiguar lo que pasaba por mi cuenta y teniéndolo cerca era más cerca.
-Te espero abajo - dijo saliendo por la puerta.
Mi mente estaba descolocada, intenté hacer lo que me pedía, por lo menos por hoy me iba a olvidar de todo, por lo menos de a lo que Erik respectaba.
Bajé rápido, no tenía ganas de desayunar, pero me cogí una manzana para que mi madre no dijese nada, sabía que todavía estaba enfadada pero no iba a ser yo la que volviese a ceder.
-¿Qué tal estás?, ya sabes con todo esto de la nueva casa... - me dijo Erik saliendo de la casa.
-Bueno... Intentándolo, no me malinterpretes está genial, pero este no es mi estilo de vida y mudarme no es que sea mi pasatiempo favorito - dije jugando con las piedras que había por el camino.
No hablamos mucho más, la cosas entre ambos seguía tensa y no sabía que decir por lo que opté por no hablar mucho.
Lo que más me molestaba es que no le podía contar lo que había sucedido el sábado y eso me estaba matando por dentro.
Entramos al hall, no había mucha gente, se notaba que era lunes, siempre faltaban la mayoría.
-Voy para mi clase, ¿nos vemos en la biblio?
Asenti, la verdad es que no le estaba prestando mucha atención, mis ojos estaban en busca de una persona a la que me daba miedo encontrar, por suerte no lo vió.
Habían pasado las 2 primeras y el examen me había salido genial lo que me alegró, recogí las cosas y salí.
De pronto un brazo me sujetó y me volvió a meter a la clase, no quedaba nadie, me gustaba recoger tranquilamente y salir de las últimas, así nadie me molestaba y viceversa.
-¿Jake?, ¿qué estás haciendo? - tenía su mirada puesta en mí pero no me soltaba.
Ni si quiera él lo sabía, se le notaba en su rostro, estaba confuso pero eso no le paró.
Sé acercó más a mí y estampó sus labios contra los míos, pero no fue como la última vez, no sé si lo estaba haciendo por despecho, por necesidad o porque simplemente le apetecía pero eso no era amor, solo era puro frenesí, mi mente reaccionaba pero no mi cuerpo, no quería seguirle pero no podía evitarlo, me cogió de la cintura y me sentó en el pupitre más cercano que había y siguió con la tortura que quería pero no podía parar.
Sus manos empezaron a bajar por la cintura, pero antes de que pasara nada más se abrió la puerta.
Jake se separó de repente y miró hacia ella.
Era Mía, no pude evitar agradecerle y maldecirle al mismo tiempo.
-Lo siento no quería interrumpir - dijo incomoda.
Jake me miró a mí y después a ella, cerró los ojos y salió de la clase.
¿Qué había sido eso?
-¡No puede seer! - gritó Mia - ¡me dijisteis que no estabais juntos!
-Y no lo estamos - la dije mirando la puerta
Había vuelto a pasar, besarme y después largase sin decir nada.
-Ya... Pues no me lo creo ¡y menos después de ver eso! ¿Qué explicación tienes para lo que acano de ver?
Niguna, no tenía ninguna y eso era lo que peor me tenía.
No pude contestarla, solo negué con la cabeza y me diriji al baño.
Se me caían las lágrimas y no entendía el por qué, eran todos emociones tan intensas al mismo tiempo que mi mente no tenía tiempo para procesarlas.
Recibí un mensaje de Mía, quería quedar para hablar y acepté, sabía que la había dejado preocupada y necesitaba hablar con ella para explicarla todo.
-A más 6 en el parque - la envié.
Pero en lo único que pensaba en ese momento era en que tenía que hablar con Jake, no podía seguir así.
Me limpié las lágrimas y salí, no podía estar más allí, necesitaba descansar y aclarar mis ideas.
Llegué a casa la cual estaba vacía, y fui directa a mi habitación, me puse música y me tumbé en la cama.
Esperé hasta las 3, ya habrían llegado a casa y no podía esperar a hablar con él, solo esperaba que no fuese como su hermano y me diese explicaciones, me las debía, me estaba utilizando para su propio beneficio, no digo que no me gustase... Pero ese no era el caso.
Salí decidida a por respuestas.
-Dejame pasar - le dije a Erik apartandole.
Necesitaba coger fuerzas y enfadarme era lo único que me las daba.
-¿Qué haces aquí?, te estuve esperando ¿dónde estabas?
Le ignoré completamente, iba a hacer algo y ahora estaba caliente, si esperaba se me pasaría el cabreo y no tendría la misma valentía para hacerlo.
-¿Dónde está Jake? - me miró extrañado pero me dijo que estaba en su habitación.
Subí y llamé a la puerta con fuerza , estaba decidida pero tampoco quería abrirle la puerta de golpe.
Cuando abrió se quedó desconcertado, que se esperaba ¿que lo iba a dejar pasar todo como si nada?
-Pasa - me sorprendió que no me echara en ese mismo momento, sabía que no le gustaba que le molestasen.
Hice lo que me pidió y me senté en el pequeño sillón que tenía junto a su cama.
-Jake...- no sabía como empezar esa conversación, todo se había vuelto muy incómodo - ¿Por qué me haces esto?
No respondió, solo se quedó mirándome pensativo.
-No sé si sabes que para hablar se necesitan por lo menos a dos personas - sabía que me estaba escuchando, pero que hiciese como si no y se quedase pasmado mirandome, me ponía más nerviosa y usé el plan por el que había optado desde el principio.
Me levanté y conseguí su atención.
-No voy a permitir que juegues conmigo Jake, no puedes besarme y después irte sin darme ni siquiera una explicación, no vuelvas a hacerlo, ¿me oíste? - seguía sin hablar, pero ya le había dicho todo lo que quería que oyese y salí de su habitación antes de que Erik pudiese verme y seguir preguntando que pasaba.
Llegué a casa más enfadada de lo que había salido, seguía sin darme ninguna explicación y eso me molestaba.
Tenía hambre y cogí algo para picar, no había comido y últimamente no tenía muchas ganas de hacerlo, aunque tampoco es que tuviese mucho tiempo.
Subí a mi habitación, hacía un calor insoportable, solo quería ducharme y quitarme todo lo que tenía encima, no tenía mucho tiempo, había quedado con Mia a las 6, por lo que fui rápida.
Y entonces lo vi.
Salí del baño, y ahí estaba, tumbado en mi cama y leyendo uno de mis libros.
-¡Jake! ¿Qué estás haciendo aquí? - estaba en toalla y entre el susto que me dió y la vergüenza que me entró de repente me coloré al instante.
-¿No me has dicho que quieres explicaciones? - dijo con una sonrisa divertida.
-Pero no aquí y menos así - dije mostrando la toalla
-A mí eso no me molesta - no quitaba esa sonrisa, no sabia que prefería, si que estuviese así o como hace tan solo hace media hora cuando me ignoraba.
-Sal para que me pueda vestir por favor - me giré para coger la ropa, pero cuando me volví seguía ahí - Jake, por favor...
-Sí quieres me doy la vuelta, pero no voy a irme - no hay quién entendiese a este chico.
No confiaba en él y se me ocurrió meterme en el baño, pero él descubrió mis intenciones y se levantó para ponerse enfrente.
-Ya te he dicho que me doy la vuelta - dijo poniendo la mano en la puerta.
-Y yo te he dicho que no me voy a vertir contigo aquí - le dije cruzando los brazos.
-Pues tienes un verdadero problema - dijo tocandose la barbilla - aunque también podemos hablar así.
Sus ojos recorrieron todo mi cuerpo y me entró un escalofrío.
Puse lo ojos en blanco y le hice girarse.
-Como te des la vuelta...
-Si no quieres que lo haga date prisa - me respondió girando la cabeza.
-¡Que no mires!
-Vale, vale - dijo riendo y poniendo los brazos arriba.
-Ya estoy, puedes darte la vuelta - dije subiendome la cremallera del vestido.
-Espera, que te ayudo.
No me dió tiempo a apartarme cuando noté sus manos en mi espalda.
Subió la cremallera lentamente mientras tocaba mi espalda con sus nudillos y se volvió a poner de gallina.
Cuando acabó de subirla me dio un beso en la nuca y se volvió a sentar donde estaba.
-A ver, ¿de qué quieres hablar? - dijo de repente.
-Pues... Ya te lo he dicho de por qué no me has dado ninguna explicación.
-¿Y segun tú por qué te la tendría que dar?
-Pues por lo que pasó en tu casa y después en el instituto y lo que acabas de hacer hace 1 minuto - tragué saliva - cada vez que haces algo así me lias, pero después haces como si nada y no lo entiendo.
-Pero eso te gusta ¿a que sí? - dijo mirándome fijamente a los ojos.
-No cambies de tema Jake - sabía por dónde quería ir.
Me cogió de la cintura y me tiró hacia él.
-Creo que la que se está desviando aquí eres tú - dijo sonriendo
-Jake, no, no me lies y responde a lo que te estoy diciendo - dije intentando apartarme de él, pero me estrechó más contra él y volvió a hacer lo que siempre me desconcentraba.
Sus labios se posaron en mi cuello y sus manos hicieron su ya rutina forma de tortura, pero esta vez no se pararon en mi cintura.
Me tumbó y se puso a mi lado.
-Si no te gustase no dejarías que te hiciera esto - dijo subiendo su mano por mi pecho.
-Jake, para...
-No esto - dijo bajandola hasta pararse por la parte baja de mi estómago.
Cuando abrí los ojos lo vi sonreír, había vuelto a conseguir lo que quería liarme y acabar haciendo lo que él quería.
Se puso encima de mi y me besó, al principio fue lento, pero se fue profundizando hasta que una llamada interrumpió, quise tirar el móvil por la ventana.
Me despegué de él sin ganas y cogí el teléfono con rabia, lo que le hizo sonreír.
-¡¿Si?! - respondí
-Lena ¿dónde estás? - mierda se me había olvidado.
-Estoy saliendo, llego en 10 minutos - dije.
-Vale, no aquí estoy - y colgó.
-Me tengo que ir - le dije.
Había escuchado toda la conversación.
-Esa amiga tuya ya es la segunda vez que nos interrumpe - me dijo tocandome el pelo - igual tengo que hablar con ella...
Lo decía en broma, pero lo conocía tanto que sabía era capaz de hacerlo.
Cogí rápidamente las cosas y salí.
Jake había salido por la ventana, lo que me aclaró como había entrado y que tenía que dejarla cerrada.
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Este capítulo es un poco más largo de lo normal, pero cuenta el principio de un nuevo comienzo, o eso parece... ¿Qué os ha parecido?
¿Creéis en esta nueva historia que se está formando?
Gracias por seguir ahí 💕
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Algo más que nosotros
Teen FictionEn la vida hay muchas historias, cuentos de hadas, princesas, príncipes azules... Pero ¿y sí eso solo fuese fantasía?¿Y si todo lo que creía había cambiado? Siempre he dicho que un chico nunca me cambiaría, que mi vida sería perfecta y que todo lo q...