Señor Hetero (Yoonmin)

1. Club-

La música resonaba fuertemente y se mezclaba con los gritos de la gente y el ruido de las copas chocando entre sí. La mayoría de sus compañeros de trabajo se encontraban allí, y todos estaban reunidos con el fin de celebrar el cumpleaños de Jeon Jungkook. Todos se hallaban ya considerablemente ebrios, desde su asiento en la barra, Yoongi podía advertir aquello, aunque las luces de colores del club por momento invadiesen por completo su vista. Le dio otro trago a su botella de cerveza, determinado a terminarla por completo para poder salir de ese lugar. 

Habían llegado aproximadamente hacía una hora, y se acomodaron en una sección que había sido reservada por el cumpleañero. Era un lugar bastante amplio, con una mesa redonda y asientos de cuero alrededor de ella. Yoongi creía que esa sección tenía una capacidad para alrededor de diez personas, y al ser él el invitado número once, encontró su excusa perfecta para escabullirse hacia la barra, y alejarse de ese grupo de ebrios escandalosos y ruidosos. Se preguntaba una y otra vez cómo era que había accedido a ir a ese club con los demás profesores. Las fiestas no eran lo suyo; no lo fueron en su adolescencia; no lo fueron durante la universidad y, por su santa madre , que no lo serían en su aburrida y monótona vida de adulto.

 – Con que aquí estabas hyung – un moreno alto, algo tambaleante se acercó a él.

– Hola Nam – lo miró por un segundo y dio otro trago a su cerveza.

– Me sorprende que aún sigas aquí, a esta alturaya te hacía en tu departamento acurrucado con Holly – rió mostrando sus hoyuelos.

– Si bueno, no es que tenga la intención de quedarme mucho más. Cometí el error de ordenar una botella grande de cerveza, así que me quedaré hasta terminarla y luego, a casa. Tengo que ponerme al día con Games of Thrones antes de que algún estúpido me spoilee.

– Vamos hyung, no seas aburrido. La estamos pasando bien, el estúpido de Jeon está tan borracho que hace unos minutos se quitó la camisa y se la arrojó a la cara a un camarero. Ahora él y Jackson subieron al escenario, estaban haciendo una coreografía de twerk! –  dio una sonora carcajeada y palmeó el hombro del pelinegro mientras reía – Pero a decir verdad la escena me dio algo de náuseas y vine a ver si te encontraba, y aquí estas!!

El mayor rodó los ojos al escuchar a su amigo ebrio tratando de no balbucear.

– De todos modos, no solo vinimos a beber, vamos Yoongi hyung estamos en un club! Hay que divertirse, bailar un poco.– Dijo el moreno mientras movía enérgicamente los hombros arriba y abajo.

– Nam, tú sabes que ni en esta vida ni en ninguna me verás bailando. Y menos en este tipo de lugares... –paseó brevemente su mirada por el club – Saben que no soy... del tipo de personas que habitúan venir aquí.

– Eso ya lo sabemos hyung, pero no estamos aquí para buscar ligues, vinimos a celebrar junto a nuestro compañero, sabes? –apretó su hombro en un gesto fraternal – al menos ven a reírte un rato con nosotros, luego márchate a regar tus plantas y terminar tu crochet. 

El pelinegro asintió antes de que su amigo se levantará de su lado y se dirigiera nuevamente a la mesa del cumpleañero. Habían pasado solo unos cuantos minutos, y Yoongi escuchó que en el lugar sonaba una canción de Nicky Minaj, acompañada de un montón de gritos, risas y vitoreos provenientes de donde sus compañeros se encontraban. No quiso ni siquiera mirar ya que, probablemente, estarían dando alguna clase de show bochornoso. Suspiró cansado y con algo de sueño. 

–Aburrido? – se exaltó un poco cuando escucho una suave voz a su lado. Se giró y vio que un joven de cabellos grises, que se veía algo menor que él, se había sentado en el asiento de la barra, junto al que se encontraba él. El muchacho tenía un trago en la mano y lo veía sonriente. Yoongi se preguntó en que momento llegó a su lado, ni siquiera lo había visto aparecer.