Señor Hetero (Yoonmin)

11. Sólo amigos?-

– Tienes que estar bromeando Chim... – Taehyung tragó con dificultad la cucharada de helado que había llevado a su boca, y miró incrédulo a su amigo sentado junto a él en aquella cama.

– Créeme que trate de autoconvencerme de que era broma demasiadas veces – Jimin sonrío levemente y suspiró – pero es tan real como desearía que no lo fuera.

Ambos amigos se encontraban recostados en la cama del castaño, con un pote de helado cada uno y buscando una película en la televisión de la habitación para pasar su noche de amigos. Jimin había convocado una pijamada de emergencia, sintiéndose desbordado por las emociones que lo habían estado atravesando los últimos días, necesitando desahogarse con su mejor amigo y que este lo consuele y lo mime un poco. Había puesto a Tae al tanto de toda su situación, viéndose obligado a contarle sobre Yoongi, todo lo que había ocurrido entre ellos y lo que le estaba ocurriendo con él en ese preciso momento. Taehyung abrió los ojos ampliamente y no emitió una sola palabra durante todo el relato, permitiendo que su amigo le contara con lujos de detalles y se desahogue en el proceso.

– Jimin, creí que ya habíamos aprendido en base a nuestra vastisísima experiencia que nada bueno sale de enamorarse de un heterosexual. En serio, ¿eres masoquista, te gusta sufrir? Porque golpearse un huevo con el asiento de la bicicleta duele menos que las consecuencias que sacas de enamorarte de un maldito heterosexual... – Jimin bajó la mirada sintiéndose un poco regañado por su mejor amigo. El silencio se hizo presente por un par de segundos hasta que la voz del más joven se oyó de vuelta.

– Quieres que te golpee un huevo? Tal vez así se te quiten las ganas de...

– No Tae no quiero que me golpees. Y para que quede claro, no estoy enamorado de él, simplemente... me gusta, no lo sé, me hace sentir algo. – dijo frustrado el peligris para comer otra cucharada de helado de vainilla de su pote.

– Ainsh no te hagas Chim, tú y yo ya conocemos la mecánica compleja de este tipo de situaciones: primer paso te gusta, segundo paso te enamoras, tercer paso te confiesas, te rechazan y rompen tu corazoncito de pollo, acto seguido engordamos cuatro kilos de tantas pijamadas con pizza y helado para superar tu depresión. Es un clásico, eso es lo que es. – argumentó el castaño, hablando serio y mirando con ojos entrecerrados a su amigo.

– Yah Tae, no me estás haciendo sentir mejor. – puchereó el peligris. – Además, no va a haber corazón de pollo roto porque no pienso confesarme esta vez, sería simplemente arrojarme a una piscina la cual sé de antemano que está más vacía que el cerebro de Jungkook.

Taehyung miró con el ceño fruncido a su amigo y le sacó la lengua en un acto infantil. Jimin sólo rio porque había logrado su cometido de burlarse del "creo-que-si-somos-algo" de su mejor amigo, aquel que conocía y apreciaba, pero de quien disfrutaba burlarse para hacer enojar al castaño.

– ¿Por qué metes a mi conejito en esta conversación, solo estás sentido porque a él si le gusta el pepino no es así?

Jimin escupió un poco del helado que tenía en su boca y se carcajeó fuertemente por los comentarios de su amigo. Adoraba la franqueza de este, y sabía que hablar con él nunca sería mala idea ya que, a pesar de la seriedad que requería esa conversación, en algún punto de la misma Tae se encargaría de largar ese tipo de babosadas que lo harían reír y desdramatizar un poco la situación. Agradecía tener la amistad de alguien tan especial como Taehyung.

Luego de bromear un rato más sobre la actual pareja del menor, hubo un silencio, seguido de un suspiro sincronizado por parte de ambos, sabiendo que debían redirigir la charla hacia ese punto que requería una pronta conclusión.

– Ok, volviendo a lo de tu amado HTD – el peligris rodó los ojos – ¿Vas a seguir viéndolo?

– Por supuesto que si Tae, por qué habría de no hacerlo? Somos amigos. Lo que sea que sienta por él no tiene por qué interferir en nuestra amistad, Yoongi es una gran persona y no quisiera dejar de compartir con él a causa de mi estupidez.