9. Una "no" cita-

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Yoongi jadeó e inclinó su cabeza hacia atrás, cerró los ojos disfrutando el momento. Sintió al contrario removerse en su lugar, abriendo los ojos y encontrándose con la mirada del menor mientras seguía con su labor. Jimin quitó el miembro del mayor de su boca, pasando su legua por lo largo y ancho de toda la extensión. Yoongi tembló ante la deliciosa sensación, amaba las mamadas que el peligris le daba, sobre todo cuando succionaba el glande de su pene y volvía a engullirlo hasta el fondo de su garganta, gimiendo en el proceso y haciendo vibrar sus cuerdas vocales, enviando un cúmulo sensaciones a la húmeda polla.

Tomó los grises cabellos del menor y comenzó a mover su cabeza, dándole el ritmo deseado a las embestidas que daba contra su boca. Jimin no rompía el contacto visual con el pelinegro en ningún momento, transmitiéndole con sus profundos orbes todo el deseo que acogía dentro. El mayor sin soltar el cabello del peligris, mordió su labio inferior y apresuró sus movimientos, dando un ritmo errático a la follada que le estaba dando a la hermosa boca de su pequeño. De repente comenzó a sentir la familiar presión en su vientre bajo, el cosquilleo delicioso que le anunciaba la proximidad de su tan deseado orgasmo. Jimin gimió fuerte con la polla aun en su boca, sintiendo como el mayor se corría dentro de ella, tragando cada gota que de ella salía.

Antes de poder siquiera disfrutar del primer espasmo de su orgasmo, Yoongi abrió sus ojos abruptamente. Estaba recostado en el sillón de su casa, con su fiel mano dentro de su pantalón y un enorme bulto bajo esta.

Yoongi gruñó desperezándose y sacó su mano de su pantalón, estirándose como un gatito recién despertando. El escenario era más común de lo que le gustaría admitir, él despertando de un sueño húmedo con el menor, con una notable erección en su entrepierna o en el peor de los casos, con la ropa interior completamente empapada. Ya se había acostumbrado a ello.

Tomó el celular que se encontraba en la mesita de centro y miró la hora. Eran casi las 15:30, la hora en la que había quedado en verse con Jimin en aquella cafetería. <<Perfecto Min Yoongi, ni siquiera es una primera cita y ya vas llegando tarde. Sin duda eres un gran partido.>> gruñó a la voz de su consciencia y se levantó de un solo salto del sillón. Corrió a arreglarse, ya no alcanzaba a tomar un baño, pero por suerte no se había corrido en sus pantalones durante su sueño, así que no era necesaria una ducha.



Estacionó su auto a media cuadra del local y bajó corriendo. Se maldecía en voz baja por haberse quedado dormido y llegar quince minutos tarde a la cita que había acordado con el peligris. <<No importa las veces que te lo repitas, NO es una cita, estúpido.>>

Se detuvo frente a la puerta y soltó un largo suspiro antes de entrar. <<Bien, aquí vamos. No lo arruines.>>

La cafetería era pequeña pero acogedora, las paredes estaban pintadas de colores pastel, pero tanto la decoración como el amueblado era moderno y llamativo. El lugar iba a la perfección con Park Jimin.

Jimin.

El pelinegro buscó con la mirada a su "no cita", viendo que el menor no se encontraba sentado en ninguna de las mesas del lugar. El corazón de Yoongi comenzó a latir apresurado, con miedo de que Jimin se hubiera cansado de esperarlo y se hubiera marchado de allí molesto.

– Buenas tardes señor Bienvenido a Mochi's, ¿quisiera ordenar algo? – una joven de pelo corto y castaño que se encontraba tras la caja registradora lo saludo cortésmente cuando éste se acercó a ella.

– Uhmm, hola, quisiera saber si... u-un muchacho lindo y de cabello gris estuvo aquí esperando por alguien. – se sonrojó luego de decir eso – yo... se supone que lo vería aquí, pero se me hizo tarde y... – una suave risa ya conocida por el mayor le cortó la explicación que estaba dando. Frunció el ceño confundido y buscó con la mirada al emisor de ese celestial sonido por todos lados. La joven frente a él sonrió enternecida, y con su dedo apuntó hacía unas puertas de vidrio que se encontraban abiertas y daban al exterior, a un patio donde habían colocadas mesas y sillas para que los clientes pudieran disfrutar de sus bebidas al aire libre.

Señor Hetero (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora