Las apariencias engañan.

Capítulo 4.

Día 14 de agosto. Lunes.

Me desperté a las 6:30 de la mañana, tenía que ir a 'trabajar', con pereza me levanté y miré la ventana, hacía mal tiempo, como siempre, el cielo estaba nublado así que no tardaría en llover. Fuí al baño a ducharme y a hacer mis necesidades. Terminé de hacerlo todo y me vestí con unos pantalones de piel largos negros y una camisa azul oscuro.

Me aclaré el pelo, me hice una coleta y me maquillé un poco. Ya estaba lista, solo faltaba desayunar, a las 7:30 tenía que estar allí, Jenna venía a por mi con su coche y me dijo que no quedaba muy lejos, desayuné leche con cereales y cuando terminé lo limpié todo.

Un cuarto después llamaron a la puerta, debería ser Jenna, abrí y la saludé.

-Hola Jenna -dije alegremente.

-Hola cielo, estás preparada para tu nueva rutina? -dijo sonriendo. Tenía bonita sonrisa.

-Bueno, sí -dije nerviosa.

-No estés nerviosa estoy segura de que te va a gustar.

-Bien -finalicé.

Subimos al coche, y fuimos directas a la empresa. Cuando llegamos, el edificio era enorme, me quedé sorprendida, Jenna me cogió el brazo y me llevó adentro, había gente por todo el lugar, uno con papeles, otra hablando por teléfono, otro leyendo papeles... Fuimos a la oficina de Jenna y me lo enseñó, estaba muy bien diseñado, era rojo y blanco, y los muebles negros, me gustó.

-Ven, vamos a ver el tuyo -me dijo.

-Vale -dije con una sonrisa.

Fuimos a 'mi nueva oficina' y era un azul claro y blanco y los muebles marrón oscuro, me encantó, sonreí.

-Te gusta? -me preguntó Jenna.

-Me encanta, gracias por todo -la abracé.

-De nada cielo, ven, mira, aquí tienes unos papeles que tendrás que fotocopiarlos todos y luego darme a mi los originales, los fotocopiados lo aguardas en esta carpeta -dijo señalando una carpeta que estaba encima de la mesa- cuando termines me avisas y te digo yo lo que tendrás que hacer.

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Al fin terminé, ésto era duro, pero da igual, yo puedo. Són las 17:30 y estaba en casa agotada, subí a cambiarme para ponerme algo más cómodo y bajé a comer algo, tenía mucha hambre, me hice un bocata con paté. Terminé y me acosté en el sofá, me puse a ver la tele y no había nada bueno, me quedé pensando en como ha cambiado mi vida, ha dado un giro de 360 grados, he madurado mucho. Hacía dias que no sabia nada de Jessie, mañana la llamaré. Apagué la tele y me fuí a dormir.

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26 días después.

Hoy era mi cumple y era sábado. Ya no iba a trabajar, no aguantaba esa dura vida, el otro día llegó una carta de España, que el colegio de allí empezaba el día 12 y que estaba obligada a ir, volvería a ese infierno, me compré un boleto para irme de aquí, no quería avisar a nadie, estaba triste, volvería a aquí pronto pero no sé. Me iba ésta tarde, ya tenía la maleta hecha, me aseguré que lo tenía todo, cerré todas las puertas de dentro de la casa, salí y cerré la puerta principal con llave. Luego fuí caminando hacia el aeropuerto, quedaba lejos pero da igual, eran las 12:56, llevaba para comer en el bolso.

Llegué al aeropuerto y me senté en una silla para esperar a mi vuelo. Saqué un bocadillo y empecé a comer. Terminé y eran las 14:00. Hablaron por megafonía y ese era mi vuelo, así que rápidamente cogí todo y subí, y me senté en un asiento. El avión empezó a subir y poco a poco me dormí.