Segunda Familia (Willexby)

Capitulo 25: Trauma

Trauma: Trastorno ocasionado por una fuerte y negativa impresión emocional.

Alex’s P.O.V.

Me senté suavemente en la silla, estábamos todos alrededor de la mesa de la casa de Eva; yo en una esquina, Guille a mi lado derecho y Eva al izquierdo. Jamás he hablado abiertamente de aquello que viví cuando tenía diez años, pero, si quería poder tener a ese bebé, debía hacerlo.

-¿Puedes cerrar la ventana?- le pregunté a Eva.

-¿Puedes comenzar ya?- trató de apresurarme el padre de ella.

-Solo quiero que cierre la ventana- dije en voz baja -, hace frío, mucho frío.-Eva se levantó y la cerró.

Tomé un hondo respiro y me armé de valor.

-Mi madre siempre fue una persona muy amistosa, ella siempre amó sus amistades y a su familia- comencé a hablar con algo de nervios, todos los ojos comenzaron a observarme -, antes no vivíamos aquí, era en una ciudad no muy grande, más al sur.

“Ahí comenzamos una vida entre ella, mi padre y yo, en aquel entonces papá era completamente diferente a lo que es hoy. En esa ciudad mi madre conoció a su mejor amiga, juntas hacían todo; iban de compras, hablaban de sus esposos, se juntaban, iban a correr y esas cosas.

Con el tiempo, cuatro meses antes de que naciera yo, nació un niño llamado Gabriel; era castaño, de ojos del mismo color, un poco más alto que yo, y muy alegre. Cuando nací nuestras madres se alegraron, ahora eran ambas mamás, entonces decidieron hacernos crecer juntos. Y así fue.”

-Alex, estás…- Guille me apuntó la mejilla, puse mi mano en ella y noté humedad. Estaba llorando sin darme cuenta.

-Lo siento.- me limpié.

-Sigue.- insistió el viejo. Respiré otra vez y continué.

"Crecimos juntos, Gabriel y yo hacíamos absolutamente todo juntos; jugar vídeojuegos, salir al parque, comer, nadar, dormir, si hasta llorábamos cuando nos decían que no a algo.

Y así fue, como nuestras madres eran mejores amigas, podíamos perfectamente quedarnos en la casa del otro y al día siguiente ir a la escuela. En ella almorzábamos juntos, íbamos a los Scouts, teníamos los mismos amigos, y si uno no le agradaba alguno nosotros, no nos importaba, seguíamos siendo él y yo. A pesar de Gabriel ser cuatro meses mayor, siempre había sido yo quien le protegía de los putos bravucones y quienes nos molestaban. Con el tiempo le incorporé valor y logró defenderse a mi lado, ya no era yo quien nos defendía, eramos los dos.”

-Que bonita amistad.- comentó Eva con una sonrisa. Por algún momento creí que ella ahora sería igual en actitud que su padre, pero veo que me equivoqué, no toda la gente es como uno cree.

"Crecimos jugando un juego de guerra, a Gabriel le encantaba aquel juego, era su favorito de todos los planetas, siempre decía eso.

Era uno en cooperativo, así que siempre estábamos jugando los dos. Lo único malo en ese juego, además de las gráficas, pero ese era por años atrás, era el final. Gabriel adoraba a su personaje, pero en la última escena del juego le hieren, y él le pide a su compañero, el cual usaba yo, que le quitara la vida porque no soportaba el dolor. Y lo hace.”

"Fueron unos días en los que Gabriel estuvo muy triste, no hablaba tanto como antes, no me hacía mucho caso a lo que le decía. Pero de la noche a la mañana, su sonrisa volvió, como si aquel juego jamás hubiese pasado."