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13 | Fin.
El día lo había comenzando con dolor de cabeza, vomitos y un dolor en el pecho inexplicable. Baje a desayunar y los síntomas no se iban, mi cabeza no dejaba de pensar en un posible embarazo y con Joaquín la última vez que nos vimos fue hace un mes y medio.
Entrene y volví a mi casa porque no paraba de estar mal, llame a mi novio y no me atendió, sentí una sensación fea pero no le di importancia.
-Hola, amiga. Que pasó?- preguntó Flor una vez atendió el celular.
-Me parece que estoy embarazada. Podes venir a casa?- hablé.
-Compró un test y voy- fue lo último que dijo.
Florencia llegó en menos de veinte minutos. La abrace y me dio el test de embarazo. Tenía los nervios a flor de piel, me temblaban las manos y quería llorar. Di muchas vueltas mientras llamaba a Joaquín pero otra vez no atendió.
-¡Deja de llamarlo!- gritó Florencia del otro lado de la puerta.
Hice todo tal cual decía en el papel, y esperé algunos minutos. Di vuelta el test y había dos rayitas bien marcadas, me largue a llorar.
-Vas a ser Madrina- dije saliendo del baño y me abrazó sonriendo.
-Felicitaciones amiga- habló y me dio un beso en la panza.
La noticia fue un balde de agua fría, no era lo que quería para este momento de mi vida pero me puse feliz de saber que iba a tener un bebé. Con las primeras personas que hablé fueron con mis papas, les pedí que no cuenten nada hasta después de los tres meses.
Mi dolor en el pecho y sensación de que algo no estaba bien, seguía a flor de piel. Con mi mejor amiga fuimos a Italia.
-Ay boluda- dijo Flor y la miré.
-Que?- pregunté y me mostró el celular.
Vi una noticia de Joaquín. Una con su ex novia y un titular que decía. "Joaquín Correa y un viejo amor del pasado." Las lágrimas salieron al segundo que termine de leer, sabía que lo se venía cuando llegue a su casa.
Abrí la puerta de su casa, al lado mío estaba Florencia, nos miramos las dos al escuchar ruidos o en realidad gemidos de parte de una mujer que no era yo. Solo me quede esperando en el living que bajarán, le deje el test arriba de la mesa y después de un rato los dos se hicieron presentes.
Joaquín no sabía dónde meterse, no le salían las palabras, y ella me miraba a mi y después lo miraba a él.
-Solo te venía a decir que ibas a ser papá- hablé y se quiso acercar.
-No me toques- pedí.
Sin decir más nada, me fui de aquel departamento, dejando todos mis sentimientos ahí.
Dosmildiecinueve
-Con el tiempo me siguió buscando, me pidió disculpas y me dijo de volver varias veces, pero mis respuestas siempre fueron un no.
-El embarazo lo transite sola hasta que nació mi hija, nos volvimos a ver en el nacimiento. Ellos se aman, tienen una relación muy linda.
-Nos une Emma, y somos los papás de ella, es la única unión que tenemos- hablé finalizando.
Sentí el aplauso de las personas presentes y antes de levantarme para las fotos, volví a hablar.
-Mujeres, cuando sientan, crean o piensen que no pueden más, acuérdense que si pueden, y vamos a poder toda la vida- hablé- Nos merecemos ser felices solas o con alguien al lado, pero siempre llenas de amor, respeto y confianza. Gracias- dije.
Los aplausos volvieron y llegaron las fotos. Hoy había sido la presentación de un libro, la historia de mi vida.
Párrafo aparte para Joaquin; Le debo un ¡Gracias! enorme. Con él aprendí a ser más fuerte y libre, aprendí que el amor tiene que ser sano, y mutuo si no, no es amor.
