Saiyajin Dreams (Fanfic Yaoi - Dragon Ball)

(One-Shot) Algún día

VEGETA × GOKU

- ¿¡Pero como ocurrió esto?! - la mujer de cabellos azules gritó de la impresión.

- No lo sabemos, esta mañana solo estaba ahí.

- P-pero el día de ayer no existía, ¿¡como es que creció de la noche a la mañana?! - Bulma tomó la cola de Goku. Era idéntica a la qué había tenido cuándo era niño.

- No lo toques demasiado, mujer - habló Vegeta mientras apretaba la mandíbula.

- Si queremos entender que pasa tengo que tocarlo.

Ninguno de los 3 entendía lo que pasaba, del cómo la cola de Goku había vuelto a crecer. A la pareja de Saiyajin los tomó por sorpresa en la mañana, ya qué el día de ayer habían estado todo el día juntos hasta dormir, y aquella cola no estaba. Ni siquiera la inteligente científica encontraba una explicación.

- Deja tu celos de lado un rato ¿quieres?, esto es algo serio. Ahora que su cola a vuelto tenemos que tener cuidado con las noches de luna llena. Si Goku llegara a convertirse en gorila será un completo desastre.

- Éso ya lo sé - gruñó el príncipe. Gracias a éso tendrían que dejar sus entrenamientos por las noches.

Miró a su pareja sentada en la camilla de revisión, aquella cola se movía de un lado a otro mientras escuchaba lo que Bulma le decía. No podía despegar su mirada de él.

- Te haré algunos análisis, tal vez así podamos descubrir el porqué tu cola volvió a crecer.

- Okey.

Vegeta estaba molesto, llevaban algún rato esperando a que su ex-mujer terminara de revisar a su actual pareja.

Ya llevaban un año saliendo. Había sucedido cuándo Bulma y Vegeta se habían separado y Milk le pidió el divorcio al Saiyajin menor. Goku estuvo tan triste que ni siquiera tenía ganas de entrenar con el príncipe, el cuál tuvo que consolarlo por algún tiempo. Fue así hasta que un día, el Saiyajin menor besó a su rival, un simple contacto de labios contra labios, pero había sido un beso.

- ¿Porqué hiciste éso? - Vegeta no sabía como reaccionar, de todas las cosas que podría hacer el idiota de Kakarotto, nunca llegó a pensar que besar fuera una de ellas, ¡mucho menos a él!

El criado en la tierra tenía la cabeza agacha, evitando mirarlo, pero el mayor podía notar perfectamente el sonrojo de sus mejillas.

- Yo... - no sabía que decir.

- ¿Tienes alguna mínima idea de que fue lo que hiciste? - Goku mordió su labio inferior al escuchar el duro tono con el que le hablaba el príncipe - ¡responde!

- S-si.

- ¿Y por qué a mi? - no le respondió, solo se dedicó a mirar sus pies. Así que molesto; le tomó de la ropa con fuerza y lo obligó a mirarlo - ¡contéstame, Kakarotto!

- ¡No lo sé! - aquél sonrojo aumentó - s-solo quería hacerlo... t-tenía muchas ganas de hacerlo

Vegeta lo miró detenidamente. Nunca había visto al guerrero de ése modo, ruborizado y lleno de vergüenza. Un sentimiento extraño le invadía el estómago al verlo así.

Dejo salir un suspiro y lo soltó.

- No sabes besar.

- ¿Eh? - Goku estaba confundido. ¿Vegeta no estaba molesto con él?, ¿porqué?

Ése día no volvieron a hablar del tema, pero los siguientes, Goku siguió haciendo lo mismo, buscaba cualquier oportunidad para besar al príncipe, ya fuera en la boca o mejillas. Vegeta nunca se nego, todo lo contrario, en algún momento él comenzó a seguirle los besos. Cuándo vio la expresión de Kakarotto después de algunos simples besos, se volvió adicto. Si con par de besos calientes podía hacer qué el ser más poderoso de la tierra temblara de placer, ¿como sería si lo tocara de forma sexosa?