"Serendipity" (Yoonmin)

Capítulo 4: "Just Dance"

Luego de la increíble noche, volvió a casa agotado y totalmente sudado. Por suerte la cafetería, por ende, el Motel, no quedaba nada lejos de su casa y logró llegar ileso.
Estaba feliz por la linda noche, Yoongi había sido algo lento, jugando con él y sus increíbles ganas de mantener relaciones sexuales con el otro, el cual le gustaba ver su rostro, mientras gemía su nombre.
Pero se estaba dejando llevar por los pensamientos de los hechos de minutos atrás. No iba a volver a tratar con su propia erección.

Jimin, luego de bañarse y mirar su teléfono, gruñó en alto cuando se dio cuenta que se había olvidado de un detalle muy importante. Tenía que ir a su academia de baile, junto con sus amigos y había follado ya bastantes veces, las suficientes como para tener pereza de ir, a demás del dolor.

Se tiró a la cama, y se sobresaltó cuando un gato negro saltó a su pecho y se acostó ahí. Era Mochi, su gatito. Los ojitos de Mochi le hacían recordar mucho a Yoongi, para cuando quiso volver a acariciar a su gato, estaba dormido.

Al día siguiente, se despertó por culpa de su gato, el cual estaba rogando por comida. Se levantó, para nuevamente gruñir. Su vida era exactamente lo mismo que nada, era tan reiterativa.

Tan aburrida.

Tan sin sentido.

Tan asquerosa.

Tomó una manzana de la mesa y le dio un mordisco, fue fácil arrancar un pedazo de la misma, pues se juntó el dolor y la fuerza con la que lo hacía, para luego simplemente masticarla y tragarla.

Suspiró, ese dolor no iba a parar.
No iba a tomarse un ibuprofeno, él sentía que era exactamente lo mismo que tomar un dulce de miel, la dulce promesa de que ibas a curarte, o iba a hacerte bien, cuando en realidad, lo que te mejora es la mente, siendo engañada.

Estaba pensando demasiadas cosas, y se le iba la cabeza, empezando a delirar con idioteces, que ni el mismo sabía la razón por la cual las pensaba. Pero bueno, todos tuvimos éste momento.

Fue a ducharse por segunda vez, luego de obviamente darle la comida a Mochi. Para luego cambiarse y caminar a la academia de baile. Hace varios días no iba a bailar, por falta de tiempo, por las lluvias y nubes que a veces, se les daba por aparecer.

Una vez llegó, se encontró con unos amigos, Hoseok, Tae, Seokjin, Jungkook y sorpresivamente Yoongi.
¿Que mierda hacía él ahí?

-Que raro tu llegando minutos antes
- Habló Seokjin entre risas, mientras tomaba de la cintura a su pareja, Hoseok, el cual le dio un beso en la mejilla para terminar de enternecer el ambiente.

-Si, lo sé. Mochi se despertó temprano y fue algo complicado. ¿Que haces aquí de todo modos, Seokjin?-Preguntó mientras le sonreía.

-Hoy salí temprano de la cafetería, y quise venir de sorpresa para mi cuchurrumin- Juntaron las narices y las juntaron tiernamente.

-Dios, son demasiado lindos. Ayuda. -Dijo Yoongi dándole un golpe en la espalda a Hoseok.
-Ay! Nene!... Ya vas a tener a una persona así, que te quiera de esa forma.- Dijo devolviendo el golpe, con palabras.

El contrario se limitó a rodar los ojos y encogerse de hombros, para luego ir a sentarse. Hoseok suspiró, ese chico era realmente serio a veces, pero sólo cuando había gente que no conocía. Mientras que Jimin se reía por un chiste de Jin.

Luego de unos veinte minutos, el profesor entró a la sala, y todos se quedaron estáticos en sus lugares, pues era la autoridad luego de Hoseok, el cual estaba segundo al mando.

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Estaban otra vez en ese calor, era extraño, pues cuando estaban juntos, los demás no existían. Estaban en el baño, besándose luego de la clase.

-Mierda, ¿Por que siempre terminamos así?...-Paró el beso, y por lo tanto Yoongi paró el toqueteo debajo de la camisa del menor.

-Sinceramente, eres irresistible, niño bonito.- Fruncio el ceño con el nuevo apodo que había ganado. Bueno, ¿que más podía hacer?... Siguieron los besos, hasta que tocaron la puerta. Que situación tan incómoda.

-¿Que carajo hacen?...- Seokjin estaba parado con los brazos cruzados mirándolos.

El silencio se hizo parte del tenso ambiente.

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