Pide un deseo » YoonMin.

[8]

Número desconocido:

Conozco tu secreto, oppa ;)

20:59pm.

YoonGi frunció el ceño ante el mensaje que había recibido, no tenía alguna idea sobre quién podría ser.

¿Quién eres?

Respondió rápidamente mientras veía a sus compañeros moverse de un lado a otro, estaban preparándose para salir a un concierto, todos estaban nerviosos pero a la misma vez; confiados. Ojeó nuevamente el teléfono y no había respuesta alguna todavía. Se relajó un poco pensando que había sido una equivocación.

Ese había sido su error.

Nunca debió relajarse.

— Hyung. — Taehyung se colocó a su lado mientras comía una pequeña donita espolvoreada de azúcar con chispas de chocolate. YoonGi asintió para hacerle saber que lo había escuchado. — Estaba pensando en que pudiéramos visitar Daegu juntos. —YoonGi no pudo ocultar su sorpresa ante los ojos del menor, Taehyung le guiñó el ojo divertido. — Vamos hyung, acepta. — Taehyung intentó abrazarlo y YoonGi trató de huir del ataque del menor. Las risas de Taehyung lograron llamar la atención de sus compañeros, NamJoon junto SeokJin reían a viva voz mientras que Hoseok y JungKook grababan aquel momento. El único que parecía no gustarle aquel intercambio era a Jimin, quién veía todo aquello con el ceño fruncido.

— ¿Qué se supone que están haciendo? — Preguntó el mayor de los maknaes, notoriamente molesto. — Estamos atrasados con el concierto y ustedes están jugando como idiotas. — Nam intentó intervenir pero Taehyung respondió rápidamente.

— Cierto que el único que puede jugarse con la pareja de los demás eres tú y nosotros debemos guardar silencio, Jimin-ssi — Mencionó secamente dejando a YoonGi y caminando para acercarse un poco más a Jimin. La tensión entre ambos era evidente. — No jodas Jimin si no te gusta que te lo hagan. — Mencionó aquello en voz baja mientras se iba dejando el salón en donde todos deberían estar para empezar el concierto. Jimin suspiró sonoramente y se llevó las manos a la cabeza intentando disipar la pequeña molestia que estaba sintiendo. YoonGi observó aquello en silencio y decidió pasar por su lado sin decir nada, Jimin no toleró aquello.

— ¿A dónde vas? — Preguntó con la molestia siendo aún palpable en su voz, el resto del grupo decidió salir y dejarlos solos. — YoonGi-hyung, hay cosas que...

— No estoy para esta mierda. — Mencionó secamente el pálido. Jimin se asombró por lo que el mayor dijo, viéndolo fijamente. — Estábamos jugando, Park. Así como tú lo haces, deja los celos.

— Es diferente. — Solamente respondió el menor frunciendo el ceño. — Tú sabes que es falso, no puedes simplemente...

— ¿Te escuchas? — Preguntó el pálido. — Te acabas de dar tú mismo la respuesta, yo también te lo dije. — Enarcó una ceja. — Tú juegas con Jeon, yo juego con Taehyung. ¿Qué tiene de malo?

— Nada. — Respondió entre dientes el menor, siendo regañado internamente por el mismo mientras se lamentaba por su actitud anterior tanto con su pareja como con su mejor amigo. — Lo siento hyung. — Se disculpó el menor. YoonGi se encogió de hombros mientras lo dejaba solo. El castaño sacó su teléfono y volvió a leer aquel mensaje que había llegado hace una hora atrás.

Número desconocido:

Ellos se están riendo de ti.

Yoon Gi y Tae Hyung-oppa.

¡Obsérvalos mejor!

19:01pm

Jimin frunció el ceño ante la pequeña molestia que crecía dentro de él. ¿Quién le había mandado aquel mensaje?

[.]

Jimin despertó sobresaltado, el sudor corría por su frente y cuerpo, su respiración era rápida, como si hubiese corrido un maratón. Von estaba sentada al frente de él, con la misma manzana en sus manos brillando de una forma peculiar.

— Él también recibió un mensaje. —Mencionó sin aún creerlo, con la respiración poco a poco calmándose. — ¿Tú sabes quién lo mandó? — Preguntó.

— Sé todo Jimin-ssi, pensé que ya había explicado eso. — La pelinegra de belleza etérea se levantó de la silla. — Puede que tú error fuera el que no le dieras mucha importancia a tu relación. — Jimin quiso discutir aquello pero con solo una mirada de aquellos filosos ojos desistió. — Pero tu chico estaba haciendo las cosas mal al ignorar todo lo que se le venía con ese mensaje.

— ¿Quién es? — Preguntó nuevamente. Von sonrió jugando con la manzana en su mano.

— Todo se sabe a su debido tiempo, Jimin. Solo descansa un poco más, pero no te acostumbres a esta vida, el tiempo se acaba. — Y como si fuera un frío recordatorio, el reloj de su mesita de noche empezó a sonar en el preciso momento que la mujer desapareció.

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[.]

Quisiera chismear con alguien y preguntar que esperan con esto, pero ya me acostumbré a mi triste soledad acá en wattpad.

De todas formas, muchas gracias por leer a quienes lo hacen.

¡Disculpen cualquier error y hasta la próxima!